PARQUE MARÍTIMO

Carlos Cruz García

El famoso parque marítimo. Sí, otra vez. Pero eso sí, no vamos a hablar del muelle. Siempre he pensado que debería haber sido así, una cosa es el muelle y otra el parque marítimo, pero la moda ha sido juntarlos hasta asfixiarlos. Y fíjense por donde que de lo que menos se habla es qué quiere la ciudad para esa explanada de unos 90 mil metros cuadrados. Uno tampoco lo sabe, ¿pero es que el municipio se ha pronunciado al respecto? Me parece que no.

 A estas alturas de la película explicar en qué momento estamos de ese film que se va pareciendo a una de terror no es fácil. Si nos vamos a lo básico, resulta que esa explanada era responsabilidad o competencia del Ayuntamiento hasta hace un par de años cuando supuestamente el municipio se la devolvió a Costas (y así el municipio de paso se ahorraba unas perrillas)para que este también supuestamente se la cediera al Gobierno de Canarias para que esta institución construyera ese parque marítimo que todos adjuntaban al nuevo muelle (finalmente hubo que retirar esa condición de que se cedía para que se construyera el muelle, que era el objeto de aquella renuncia). Todos estaban en el ajo, incluido el Cabildo, que fue el más interesado en hablar de este asunto hasta que decidió que ya no estaba interesado,  cosa que ocurrió justo antes de las elecciones municipales. Y sí, se dejó de hablar del parque marítimo, de la financiación, del futuro. Vamos que nadie quería responsabilizarse de que allí, o sea aquí, se iba a construir algo.

Y decimos supuestamente porque en todo ese proceso hay muchas cosas que siguen sin estar claras. No está claro que Costas haya recibido de vuelta esa explanada porque una gran parte del dique original de contención está semiderruido por la acción del mar y Costas, o sea el Estado, quiere el dique completo. Obviamente el Ayuntamiento no tiene ni el dinero ni las ganas de reconstruir el dichoso dique. Y claro, a partir de aquí todo lo que se pueda contar depende de quién efectivamente sea el responsable del terreno, si es que alguien lo es. Por lo que el parque marítimo se ha convertido en un Guadiana que aparece y desaparece, unas veces diseñado por una empresa que por no tener no tuvo ni web (se diseñó un centro comercial de estilo canario, vayan ustedes a saber qué carajo es eso) o por un Cabildo que nadie sabe a quién ha preguntado sobre lo que quiere el municipio o el Ayuntamiento (que en este tema no sabe ni contesta por ahora), en la dichosa explanada, en el siempre futuro parque marítimo.

Quizá no importe lo que se vaya a hacer allí. Acaso ese pedazo de tierra ganado al mar en su momento sirva solo para hablar de él. Yo ya he cumplido pues. Que pase el siguiente.