Nery Estévez – Rosario - Psicóloga Clínica
Cada ser humano maneja diferentes concepciones sobre la vida y todo cuanto ocurre en el universo.
Una de estas concepciones que se han debatido fuertemente es la
reencarnación.
¿A quién no le ha ocurrido en alguna ocasión que, ante una imagen,
situación o paisaje desconocido, se ha
sentido desconcertado y ha pensado que
ya ha estado ahí, o lo ha vivido o conocido anteriormente, aunque nunca haya estado ahí?. Para esta doctrina,
el cuerpo no sería más que una túnica caduca y descartable que el alma inmortal
teje por necesidad, y que una vez gastada deja de lado para tejer otra.
Según la teoría de la reencarnación, el alma sobrevive la muerte y retorna en intervalos variantes, para nacer en otro cuerpo físico, con el propósito de
crecer en conocimiento y sabiduría. Parte de esta creencia, sugiere que todos
experimentamos la vida, como hombres y mujeres miembros de varias razas, clases
económicas y sociales. Es la creencia en una evolución del alma (o psyco o
animae) que puede realizarse a través de los nacimientos sucesivos, y a través
de experiencias.
La reencarnación es la creencia según la cual, al morir una
persona, su alma se separa momentáneamente del cuerpo, y después de algún
tiempo toma otro cuerpo diferente para volver a nacer en la tierra. Por lo
tanto, los hombres y las mujeres, pasarían par muchas vidas en este mundo.
¿Por qué el alma necesita reencarnarse? Según esta creencia,
porque en una nueva existencia debe pagar los pecados cometidos en la presente
vida, o recoger el premio de haber tenido una conducta honesta. El alma está,
dicen, en continua evolución. Y las sucesivas reencarnaciones le permiten progresar hasta alcanzar la perfección.
Entonces, se convierte en un espíritu puro, ya no necesita más reencarnaciones,
y se sumerge para siempre en el infinito de la eternidad y se hace uno con
Dios.
Algunos dicen, que la idea de la reencarnación surgió en parte
debido a que el ser humano, asimiló la
idea cíclica de la vida en general. Por ejemplo, el sol sale, luego se esconde
y se repite el proceso; lo mismo para la luna. De igual manera
esto ocurre con las estaciones y con la vida vegetal, que nace, se desarrolla y muere,
según la estación del año que esté imperando. Así, el hombre habría aplicado la
misma lógica, a su propia existencia.
De igual manera, otros
piensan que el concepto de
reencarnación, nace como una manera de explicarse las diferencias notorias
entre las vidas de las personas, que aparentemente no serían justas sin alguna
causa que les diera sentido. Por ejemplo, el hecho de aquellos que viven sanos
y exitosos en el ámbito personal y material o económico, con respecto a otros
que son pobres o sufren de terribles enfermedades.
Es así, como con la
introducción de la idea de la reencarnación, se establece que las condiciones
de la vida actual de un individuo, es el resultado o el efecto de lo realizado
en una vida anterior. Por ende, si la
persona vivió una vida impropia, la malgastó, hizo daño, vivirá una nueva vida
en la cual sufrirá diversas desgracias.
En otras palabras, estaría
pagando sus culpas, correspondientes a su vida pasada. De manera contraria, quien vivió una vida en la cual practicó
virtudes y se ajusto a valores morales, volverá a vivir en un ambiente pleno y
sin mayores sobresaltos. Es el cumplimiento de la Ley de la Siembra y la
Cosecha (Causa y Efecto).
Una encuesta realizada en la Argentina por la empresa Gallup,
reveló que el 33% de los encuestados cree en la re-encarnación. En Europa, el
40% de la población se adhiere gustoso a esa creencia. Y en el Brasil, el 70%
de sus habitantes son re-encarnacionistas. Por su parte, el 34% de los
católicos, el 29% de los protestantes, y el 20% de los no creyentes, hoy en día
la profesan.
Y usted, lector, lectora que hoy comparte este momentito con
nosotros… ¿ Cuál es su opinión sobre la reencarnación?.
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