José Melchor Hernández Castilla
Según nos cuenta el investigador Antonio Galindo Brito, en su artículo
“La Romería de San Amaro (2019)”, publicadado en www.puertodelacruz.com, Bernardo Valois adquiere el
6 de junio de 1702 por compra a Sebastiana
Martín, viuda del inglés Ricardo Antonio, una casa terrera en la que tenían
plantadas parras, con un estanque para agua, con árboles frutales, todo cercado
de paredes, en el lugar de La Paz.
El mismo Bernardo Valois
comenta en 1701: “en ese año reedifiqué
la ermita de La Paz, que me costó 3.000 reales, habiendo anticipado lo mismo a
cuenta de los 80 reales de tributo que pago por La Paz y el terreno adscrito a
la misma. Este tributo debo pagarlo hasta abonar aquellos 3.000 reales, que
será dentro de 37 años. Al mismo tiempo doné diversos ornamentos a la citada
ermita o capilla, todo lo cual aparece en la escritura otorgada con los
mayordomos de la ermita o capilla”. Además, afirma que en 1918: “compré la viña
de Sancho Caballero cerca de La Paz
por 33.006 reales, dos cercados de maíz de la Banda de Cristóbal Sansón encima
de mi molino, varias parcelas de viñedo y tierras en La Isleta a D.Bartolomé de
Casabuena, D. Jerónimo de Ponte y hermanos y herederos, y varios tributos de
maíz” (Valois, Bernardo, 1687-1724; en Guimerá Ravina, Agustín, 2005. Las
Memorias del comerciante irlandés Bernardo Valois. Gobierno de Canarias, San Cristóbal de La Laguna. Páginas 70 y 72).
Manuel Rodríguez Mesa, en “Puerto
de la Cruz: precisiones sobre sus orígenes y evolución” (páginas 100 y 101),
nos ilustra con el antiguo nombre de La Paz (lomo de San San Miguel), en
escrituras de terrenos de 1584 y 1585: “en
el lomo de San Miguel, oy… pago de
la Pas de Luis de Samartín y de
Catalina de Estopiñan; 4 fs en la Pas…, lindando con tierras de Domenigo Riço, Sancho Caballero”. “La
ermita de nuestra señora de la pas”, se halla bajo el patronazgo del regidor
Juan de Mesa, desde al menos 1589, siendo cedida a los religiosos dominicos del
Convento de San Benito de La Orotava entre 1590-92. El 23 de agosto de 1606,
Beatriz Perera, viuda de Jorge Hernández, dispone ante el escribano Roque
Xuárez “perpetuamente una misa resada al glorioso santo” San Amaro. De ahí, el
nombre de la ermita de San Amaro o Nuestra Señora de La Paz.
En julio de 1522, el regidor Andrés Suárez Gallinato, como tutor y
curador de los hijos y herederos de
Diego San Martín, establece un contrato con Martín Yanes, establecido en La Orotava: “se conciertan de manera
que el primero da a partido al segundo todas las cañas nuevas y viejas, socas y
resocas, todas las que tienen en el valle de La Orotava, con toda el agua que
les pertenece, por 5 años, a partir del día de la fecha. Martín Yanes ha de curar todas las cañas y las que en adelante se
plantaren, escardar, desgusanar, cavar, regar, bien labrar, armar a los ratones
y hacer todas las bienhechorías que el buen cañaverero debe hacer, envarar las
madres si fuere necesario, y hacer todos los otros beneficios que convengan. Suárez
le dará 3 esclavos, Juan Ferrero, Martín y Francisco Bagasero, negros, a los
que se obliga a vestir durante el dicho tiempo, y, para el mantenimiento de
Martín Yanes y el de los esclavos, dará 40 fs. de trigo cada año, pagados por
sus tercios a 3 fs. de trigo, o 4 almudes, por cada mes; además, cada año dará
1 arroba de aceite y 6 reales para 1 puerco por Pascua de Navidad, en cada año,
durante los S de duración del partido. Si algún esclavo muriere o enfermare,
dará otro en su lugar, o, en su defecto, 1 dobla cada mes por la soldada,
mientras no le diere el esclavo; los esclavos estarán a la cantina en la
hacienda y no saldrán sin licencia de Andrés o del mayordomo de la hacienda” (Coello Gómez, María Isidra; Rodríguez
González, Margarita; Parrilla López, Avenilino; 1980. “Protocolos de Alonso
Gutiérrez, 1522-1525”. Instituto de Estudios Canarios. Página 178).
Por José Antonio Cebrían Latasa y su “obra Ensayo para un Diccionario de
Conquistadores de Canarias, 2003” (Páginas 432-433), conocemos que el leonés
Diego de San Martín, casado con Ágreda Cabrera, era un hacendado del azúcar en
Taoro (Valle de La Orotava) junto a Bartolomé Benítez y Lopes Fernández.
Fallece en 1516, dejando la tutela de los hijos menores en manos de Andrés
Suárez Gallinato. Los hijos de Diego de San Martín son: Juan; Luis
de San Martín, casado posteriormente con Catalina de Estopiñan; y María de
Cabrera, que casaría con Alonso de Llerena, escribano público de Tenerife.
Así, que el propietario del lomo de San Miguel, después pago de la Paz,
a su mayoría de edad, sería Luis de San
Martín. Por otra parte, el contrato realizado en 1522 por Andrés Suárez
Gallinato con Martín Yanes se realizó en el lomo de San Miguel o pago de la Paz;
la ladera o acantilados recibirá el nombre de Martín Yanes, convirtiéndose por
el habla popular, a través de los años, en ladera o acantilados de Martiánez.
De los colindantes de Diego de
San Martín, como Doménigo Riço y
Sancho Caballero, tenemos algunos
datos. El mercader genovés Doménigo Riço
se asocia con el regidor catalán Antón Joven, no sólo para la gestión y
comercialización del azúcar, sino para cualquier actividad comercial que les
diera beneficios; así, desde 1527, actúan juntamente para el suministro de leña
para los ingenios de Gran Canaria (Rivero Suárez, Benedicta, 1991. “El azúcar en Tenerife, 1496-1550”.
Instituto de Estudios Canarios. Páginas 45, 74 y 99)
Sancho Caballero es un mercader sevillano, del que tenemos constancia ya en enero de 1520
(Padrón Mesa, María, 1993. Protocolos de
Juan Márquez, 1518-1521. Instituto de Estudios Canarios. Página 210): “Diego
Fernández Enamorado, vº., debe a Sancho
Caballero, mercader, est., 2.400 mrs. por ropa que le compró, a pagar en
dineros de contado por San Juan de junio.- Ts. Jerónimo Joven, Francisco Díaz,
mercader, y Juan de la Fuente, ests.- Por no saber, Jerónimo Joven”. Además, era escribano público (Rivero Suárez, Benedictina,
1992. “Protocolos de Juan Márquez 1521-1524”. Instituto de Estudios Canarios. Introducción,
página 10).
Su padre, Juan de Jérez, se dedicaba principalmente a la venta de ropa (Galván
Alonso, Delfina, 1990. “Extracto de los Protocolos de Bernardino Justiniano, 1526-1527”.
Instituto de Estudios Canarios.
Página 143). La presencia de Juan de Jérez en Tenerife se constata desde julio
de 1510, junto a su hermano Rodrigo de Jérez, dedicado a la venta de zumaque o
ropa. (Clavijo Hernández, Fernando,
1980. “Protocolos Hernán Guerra,
1510-1511”. Instituto de Estudios Canarios. Páginas 317 y 343). La última
información de la que disponemos de Sancho Caballero es de 1536: “Francisco
Sánchez, sastre, vº., vende a Sancho
Caballero, morador, presente, 1
esclavo negro llamado Cristóbal, de buena guerra y no de paz, por 50 doblas de
oro castellanas de esta moneda de Canaria, que declara haber recibido.- Ts.
Juan Alonso, mercader(?), Juan de Ortega y Francisco Márquez,
vs. y ests.- Francisco Sánchez” (Luis Yanes, María Jesús, 2001. “Protocolos de
Hernández González. 1935-36”. Instituto de Estudios Canarios. Página 19).
No hay comentarios:
Publicar un comentario