Pastor Abreu, Antonio
Conociendo a Karl Marx (1818-1833), y la influencia de un
hombre de negocio, en su vida. Siendo el economista más influyente de todos los
tiempos. Nació en Prusia y vivió en París y Bruselas. En todos estos lugares
editó periódicos que fueron cerrados por el gobierno tan pronto como él se hizo
cargo de ellos. En 1849 se trasladó con su familia a Londres.
Los ciudadanos tienen que saber, quién fue Marx y su pobre
y escasa aportación en la evolución de una sociedad, de no ser apoyada por un
próspero empresario. He aquí el contrapunto: un teórico necesita del capital,
para conseguir su fin personalista y luego trata de destruir el sistema
económico. Con este desarrollo tratamos de desmontar la gran mentira construida
en base al comunismo.
Marx no tenía un puesto académico ni otro trabajo regular y
aunque ganó algún dinero escribiendo para periódicos, entre ellos el Tribuna de Nueva York, durante la mayor parte
del tiempo que residió en Londres, vivió en la pobreza. Su coautor, Friedrich
Engels, un próspero hombre de negocios, lo mantuvo mientras investigaba. Más
tarde, se dice que Marx, recibió una herencia que mejoró su situación
financiera.
Encima agraciado por la suerte. ¿Y el esfuerzo, el
sacrificio, con el que identificaba a los trabajadores? Nunca lo probó en sus
carnes. Cosas de teóricos. La mayor parte de su estancia en Londres la pasó en
la biblioteca del Museo Británico, estudiando y escribiendo su principal libro
de economía, Das Kapital, escrito en alemán (El capital, en castellano), del
que sólo publicó el primer volumen en vida. Su benefactor, Engels editó sus
manuscritos y notas para hacer los otros dos volúmenes. De no ser así, sería un
teórico u escritor.
Aunque el - análisis - económico de Marx se encuentra
fundamentalmente en El Capital, muchos de los elementos están presentes en el
famoso Manifiesto comunista, que escribió con Engels en 1848 y de cuyo
extractos expondremos en otra oportunidad. En el Manifiesto comunista, dicen
que, se encuentra la mayoría de los temas importantes de Marx. Destaca la idea
de que toda la historia escrita era la historia de la lucha de clases. A pesar
de que el racismo entre clases era un estigma, en su patria natal incluida la
esclavitud.
Marx interpretó la vida económica como una lucha entre las
clases y el capitalismo y, en concreto, como una lucha entre la burguesía (las
clases medias y los capitalistas) y el proletariado (los trabajadores). Donde
Adam Smith vio que, el egoísmo de los individuos les llevaba a producir
resultados que, beneficiaban a todos. Marx vio que el egoísmo de los
capitalistas le llevaba a producir resultados que empobrecían a los
trabajadores y que, de esa forma, estaban cavando la fosa del capitalismo.
A ver si lo entiendo. Un trabajador empezaba a trabajar,
sin un centavo y sin formación, y encima ganaba dinero, a pesar de comenzar
como aprendiz. Aprendizaje que era, a costa del empresario, y hasta no hace
mucho tiempo. El mayor o menor esfuerzo laboral, era el que generaban las
circunstancias debido a la escasa tecnología del momento. Hoy la transformación
laboral no se parece, ni por asomo, a las teorías arcaicas y anticuadas
planteadas en, El Capital.
Obsérvese que Marx pensaba que la burguesía (la clase media
y los capitalistas) había generado un desarrollo más rápido que el
experimentado en toda la historia anterior. Admiraba, por contra, la tremenda
vitalidad y poder del desarrollo de la economía mundial desencadenado por los
países europeos en los siglos XVIII y XIX, pero también estaba seguro de que
los salarios descenderían por la saturación de la producción, exceso de
materias primas y escasa venta. Inercia que, con la reestructuración de la
empresa, llevaría al descontento general. Vivencia que se produce en cualquier
actividad económica, hoy en día.
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