Don Cayetano Fuentes González, primer ingeniero
de Caminos, Canales y Puertos y autor del Plano del Valle de La Orotava de
finales del siglo XIX (Bruno Juan Álvarez Abreu, 31 de mayo de 2017,
Efemérides: María Luisa Melián en el recuerdo).
Cayetano Fuentes González, es hijo de Cayetano Fuentes y Acosta (1818-1863). Este último, “aunque habiendo cultivado la escultura en madera, se le
conoce más bien por su actividad docente, desempeñando el cargo de maestro de
primaria con bastante éxito y reputación... Hay que advertir, sin embargo, que
muchas de las obras consideradas del siglo XIX sólo son productos de las
intervenciones practicadas por escultores-restauradores, caso de Cayetano
Fuentes y Acosta, que han dejado impreso su estilo” (Fuentes Pérez,
Gerardo, 2008. “Fernando Estévez del Sacramento: el escultor del siglo XIX” del
libro El Despertar de la Cultura en la Época Contemporánea. Gobierno de
Canarias. Páginas 223, 234). A mediados del siglo XIX, transcurridas ya unas
décadas desde la clausura del convento de San Benito de La Orotava, para dar de
nuevo un impulso a la procesión en la mañana del Viernes Santo, Cayetano
Fuentes y Acosta restaura las imágenes de San Juan Evangelista, la Magdalena y
la Verónica, de las que no existían más que las cabezas y algunas manos en
muy mal estado (Lorenzo Lima, Juan Alejando, 2001. “El escultor Cayetano
Fuentes Acosta: su obra en la Semana Santa del siglo XIX”. Programa de Semana
Santa de La Orotava, 2001).
“Cayetano Fuentes y Acosta fue el primer maestro de La Orotava que
ejerció su tarea de forma continua y normal, 1839-1852. Su escuela, de nueva
creación (1839) fue llamada desde entonces escuela de niños de La Concepción… Se
casó con doña Ciriaca González Martín, de muy holgada posición económica… La
familia vivió en la calle La Hoya, N° de familia 313, según datos de padrones
municipales” (Martínez Sánchez, Juan A., 1999. “La Orotava. Sus Maestros, sus Escuelas,
de 1767 a 1900. Centro de Profesorado Valle de La Orotava. Páginas 41, 45), hoy
calle Hermano Apolinar.
Ciriaca González Martín es hija del gran propietario de tierras,
Bernardino González Hernández; en 1876, aparece como la séptima mayor
contribuyente de impuestos por tenencia de propiedades. “Así, su padre, Bernardino González, natural de La Orotava, era ya el 14º
mayor contribuyente en 1849, siendo su líquido imponible de 10.100 reales de
vellón (rvon.), de los que 8.810 correspondían a sus tierras y 1.290 a 15 casas”
(Rodríguez Acevedo, José Manuel, 2008 Caciquismo y Cuestión Agraria en
Tenerife. 1890-1936. Capítulo 7. “La Propiedad de la Tierra en el Valle de La
Orotava”. Página 559). Cada real de vellón equivale a 25 céntimos de
peseta, o una peseta son 4 reales de vellón. “El
historiador tinerfeño Nicolás González Lemus afirma que algunas propiedades
importantes las obtuvo en pago por las deudas contraídas con él (se dedicaba a
la actividad del préstamo), por algunos miembros de la aristocracia, afectados
a raíz de la crisis del negocio de la cochinilla. Esto pasó, por ejemplo, con
la Hacienda La Palmita, de Luis Benítez de Lugo, que no pudo pagar, en 1874, la
deuda de 30.528 ptas. que tenía contraída con Bernardino González” (González
Lemus, Nicolás, 1996. “Génesis del
turismo y presencia británica en Canarias. Tenerife, 1850-1900”. Página
181).
“Ciriaca González Martín figuraba
con una extensión total de tierra amillarada de 74 ha., 78 a., 55 ca. Buena
parte de estas fincas fueron adquiridas por herencia de su padre, Benardino
González Hernández, y otras por compra a Luis Benítez de Lugo; a Alonso Llarena
y Ponte (se amillara a su nombre en 1875-1876); al Marqués del Sauzal
(Haciendas de La Candia y La Mocana: escritura de 14-12-1876 ante Nicolás Escovar);
a Francisco Bethencourt y Yanes (escrituras de 5-8-1877, 20-6-1879 y 15-12-1879
ante Nicolás H. Escovar); a la Marquesa de la Florida (escritura de 27-11-1879
ante Nicolás H. Escovar), a Juana González Orta; a Pedro Ponte y Llarena
(escritura de 3-3-1880 ante José J. Bendris), a los herederos de Sebastiana
Frías de Barriuso (escritura de 14-3-1880
ante José. J. Bendris); entre otros.
Estas propiedades pasaron a sus hijos y herederos (Quirina, Isabel,
Saturio, Fernando, Bernardino y Cayetano
Fuentes y González) por partición de 9-10-1899 ante José Romero de Castro,
y se amillararon a nombre de estos en el apéndice para 1901”. -Fuente: Amillaramiento
sin fecha de mediados del siglo XIX-. (Rodríguez Acevedo, José Manuel, 2008
Caciquismo y Cuestión Agraria en Tenerife. 1890-1936. Capítulo 7. “La Propiedad
de la Tierra en el Valle de La Orotava”. Página 564).
Diccionario del español jurídico: “Amillaramiento,
contribución territorial sobre inmuebles, cultivo y ganadería, que grava de
forma directa a todos los contribuyentes, estableciéndose un cupo y cuota de la
contribución territorial, que inicialmente fue fija. Fue establecida por la ley
de presupuestos de 23 de mayo de 1845 y Real Decreto de misma fecha, modificada
posteriormente en 1885” (Real Academia Española: dej.rae.es).
“En 1863, se creó el Ministerio
de Ultramar. Tres años después llegaron los primeros ingenieros civiles a los
territorios ultramarinos. Durante un tercio de siglo, hasta 1898, se ocuparon
de los proyectos y obras que anteriormente habían realizado en exclusiva los
ingenieros militares… A principios de 1878, anotamos 18 ingenieros de Caminos
en Ultramar: 8 en Cuba, 5 en Puerto Rico y 5 en Filipinas, además de un jefe
del Negociado de Obras Públicas y un ingeniero subalterno en el Ministerio de
Ultramar, en Madrid. Señalaremos que entre éstos, 18 ingenieros, 2 —Antonio Molina Galindo y José Paz
Peraza— eran canarios, lo cual es
significativo si se tiene en cuanta la escasa cantidad de ingenieros que las
Canarias habían aportado hasta esa fecha al Cuerpo de Caminos. Concretamente,
además de los citados, eran los hermanos Ángel y Francisco Clavijo y Juan León
y Castillo. Casi una década más tarde acabaría la carrera otro canario, Eugenio
Suárez Galván, y luego, hasta finales
del siglo, Orestes Hernández y Cayetano
Fuentes González, a los que no tentó aventura ultramarina” (Sáenz Ridruejo,
Fernando, 2009. “Ingenieros de Caminos en Puerto Rico, 1866-1898”, AEA, nº 55. Páginas
311, 315, 316).
Cayetano Fuentes González termina sus estudios de Ingeniero de Caminos en 1892 (Relación nominal
de los ingenieros de caminos que terminaron sus estudios en los años de 1839 a
1899).
El ingeniero N. Cañizares, ingeniero civil, intervino en el proyecto y
estudio del proyecto del ferrocarril desde Santa Cruz de Tenerife a La Orotava,
por La Laguna. Y vino de la Península acompañado del orotavense e ingeniero Cayetano Fuentes González. “El Diario
de Tenerife de 9 de
septiembre de 1892 decía: "Llegó a Santa Cruz el ingeniero Cayetano
Fuentes a estudiar el ferrocarril a La Orotava, en el vapor Antonio López,
Investigación P. T. R. La prensa de la Isla comentó esta obra. El señor don Cayetano Fuentes era el encargado de
hacer los planos de las estaciones. En el año de 1893, tiene ya hecho el plano
de la estación de Santa Cruz de Tenerife y trabaja en aquellos de las
estaciones restantes… La obra tropezó con muchas dificultades económicas y
no llegó a realizarse, aunque
probablemente hubiera tenido éxito dada la densidad de población” (Tarquis
Rodríguez, Pedro, 1967. “Diccionario de Arquitectos, Alajarifes y Canteros que
han trabajo en las Islas Canarias”. AEA. Página 520, 521, 547, 627). Diario de
Tenerife, 25 de octubre de 1892: Cayetano
Fuentes González embarca este mismo día en el vapor correo África para la
Península.
En la distribución del “Personal Facultativo de Obras Públicas”, con
fecha 8 de octubre de 1899, en el servicio ordinario de provincias,
concretamente en Almería, aparece el nombre de Cayetano Fuentes González, como ingeniero subalterno. En la revista
de obras públicas, del mismo año, aparece “Movimiento de Personal”, del 9 al 15
de noviembre de 1899, Ingenieros, “D.
Cayetano Fuentes, de Almería a Canarias”.
Conocemos algunas actuaciones de Cayetano
Fuentes González en la Península Ibérica: “Por R.O. del 15 de julio de 1894
(Gaceta de Madrid, 16-6-1984), se autorizó al Gobierno para conceder un
Ferrocarril económico desde Lucainena de las Torres a la ensenada de Agua
Amarga, sin subvención del Estado a la Compañía Minera de Sierra Alhamilla. Se
declaró de utilidad pública a efecto de las expropiaciones necesaria para su
construcción. La línea se construyó de acuerdo con el proyecto de Eduardo
Aburto, firmado en mayo de 1894 por
Cayetano Fuentes, recibiendo el 28 de octubre de 1894 el informe favorable
de la 4º División de Ferrocarriles, otorgada la concesión en 1895” (Peris
Torner, Juan, 27 de marzo 2012. “Ferrocarril de la Compañía Minera de Siera
Alhamilla-Lucainena de las Torres al embarcadero de Agua Amarga”. www.spanishrailway.com).
“Expediente de liquidación de la carretera de
tercer orden de Baza a Huércal Overa, en su sección segunda entre Purchena
hasta Santa Bárbara, a excepción hecha de algunos puentes, el total de la obra
ha sido recepcionado por la Administración, entre 1875 y 1898, encargándose al
ingeniero Cayetano Fuentes González
la redacción de la liquidación definitiva” (Cuéllar Villar, Domingo, 2003.
Transportes y desarrollo en el sureste andaluz, 1850-1950. Página 253).
Las últimas noticias que tenemos sobre Cayetano Fuentes González, es su
participación en la obra de las Casas Consistoriales de la Orotava, realiza “un
diseño para la decoración del Salón de
Sesiones”, que es ejecutado en 1901 por el masón de la logia Taoro nº 9,
Nicolás Álvarez Olivera (Martín López, David, 2007. “Juan Montserrat Vergés:
masonería y arquitectura en Granada. El Ejemplo del Buen Suceso”. Boletín de
Arte, nº 28. Departamento de Historia del Arte. Universidad de Málaga. Página
187).
Y concluimos, con el plano de Cayetano Fuentes
González, uno de los planos más claros del Valle de La Orotava, a finales del
siglo XIX, donde destacan los barrancos, los caminos y las carreteras. Este
plano es de obligado estudio, si se quiere conocer los cambios estructurales
que se han producido desde los años 60 en el Valle de La Orotava.
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