Tomás Mesa, alcalde de la Villa de San
Juan de la Rambla, tras los últimos acontecimientos sucedidos, subraya su claro
malestar por el estado en el que se encuentra su entorno, “que está pasando un
proceso doloroso y un trago de mal gusto”, a la par que recalca que su mayor
preocupación reside en la posible desazón que está sufriendo San Juan de la
Rambla, “por encima de todas las cosas, quiero profundamente a mi pueblo, al
que represento tras un proceso democrático. Y confío en que entienda que el
pueblo nunca debe ser víctima de los actos que realice una persona dentro del
contexto de su vida privada, sea esa persona alcalde o vecino y vecina”.
Tomás Mesa continúa subrayando que
“lamenta encarecidamente que se haya especulado con datos relevantes
pertenecientes a mi esfera privada, y que éstos hayan abandonado su proceso
natural de privacidad y hayan sido puestos a disposición de la opinión
pública”, en este sentido, el Alcalde continúa afirmando que “confía plenamente
en la justicia y que es ella y sólo ella la que tiene encomendado el deber de
enjuiciarme si ese fuera el caso”.
“Quiero destacar que vivo y pertenezco
a uno de los pueblos más tranquilos, bellos y nobles del norte de Tenerife y
que es por eso por lo que únicamente debe ser conocido”, continúa el regidor,
“Debe ser conocido por su rico patrimonio, por su alto nivel cultural y por su
riqueza agrícola, no por los actos que realice una persona dentro de su vida
privada y fuera de su ejercicio profesional”.
“De igual manera, de nuevo reitero mis
más sinceras disculpas por el posible malestar causado y acataré lo que la
justicia dictamine, actuando en consecuencia si se diera el caso”, concluye el
alcalde.
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