Los
socialistas consideran que ninguna campaña de empichado de última hora ni todos
los esfuerzos cosméticos del gobierno por maquillar su gestión en los medios
hasta los comicios podrán borrar el fraude electoral y la desilusión que se han
llevado muchos de los votantes de Domínguez. Para Regalado, se trata de tres
años de insustancial, estancamiento, fracaso en empleo y comercio y continuidad
solo de proyectos iniciados antes de 2011.
El
portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Los Realejos, Miguel Ángel
Regalado, afronta el último curso político del presente mandato confiado en que
los vecinos respalden la labor opositora crítica, pero constructiva y
profundamente trabajadora del PSOE, y castiguen lo que considera un verdadero
fraude electoral del PP. Los socialistas realejeros creen que, frente a las
enormes expectativas e ilusión que originó Manuel Domínguez en 2011, estos tres
años largos ya de gestión han sido un verdadero fiasco y un retroceso en el
progreso del municipio.
Regalado
está convencido de que, hasta las próximas elecciones, el PP no podrá
reconducir la situación y, por tanto, el presente habrá sido un “mandato
perdido”. Unos años en los que, por lo menos hasta ahora, habrá más parados
locales que en mayo de 2011, nula aportación de proyectos de calibre y solo
mantenimiento de iniciativas impulsadas en mandatos anteriores, con más ayudas
sociales que, por supuesto, no solo contaron con el respaldo del PSOE, sino
que, en éste y otros ámbitos, fueron reclamadas desde el principio por los
socialistas por los crecientes y preocupantes datos de instituciones como Cáritas.
El
portavoz del Grupo Socialista tiene claro que, por mucha campaña de empichado
de última hora, tal y como hacen los malos gobernantes desde siempre, el PP y
Domínguez no podrán maquillar su decepcionante gestión. Tampoco lo harán por
mucho apoyo mediático o mentiras, tergiversaciones y exageraciones que lancen
en los medios de comunicación. De hecho, se muestra convencido de que el paso
de Domínguez por la Alcaldía ha defraudado a muchos de sus propios votantes o a
los que, no siendo nunca del PP, les respaldaron en 2011 en busca de algo nuevo
y por sus promesas, sobre todo, en empleo y comercio.
Regalado
cree que el mayor fracaso del PP se refiere precisamente a las altas cifras de
paro local y a la errática y casi nula política comercial. Además, le reprocha
al alcalde su total falta de previsión y planificación, su continua
improvisación o reacción a las propuestas de la oposición, principalmente del
PSOE, y sus incumplimientos respecto a proyectos anunciados a bombo y platillo
como el hipódromo, el PGO o el complejo deportivo de La Gañanía, aparte de
situaciones como la del barco de San Agustín.
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