Antonio Abreu Pastor
Este nuevo modelo
traspasa fronteras, empodera al individuo, crea organizaciones billonarias y
genera mucha satisfacción a sus usuarios. Supone también la disrupción casi
total de modelos establecidos durante décadas, algunos de los cuales han sido
capaces de adaptarse. Sin embargo, otros muchos no lo han hecho. Y es por ahí
donde han surgido los mayores focos de controversia y conflictividad que
indudablemente han rodeado, y siguen rodeando, todo lo relativo a la Economía Colaborativa.
Ilustramos mediante
ejemplos de empresas muy exitosas cómo la revolución de la economía
colaborativa es ya una auténtica realidad. Sin embargo, es todavía más
destacable que el potencial de crecimiento (y por tanto de mayor disrupción) de
estos nuevos modelos en diferentes sectores es gigante, al encontrarse muchos
de ellos todavía en fases muy iniciales; En 2013, el ingreso total generado por
los cinco sectores más importantes de la economía colaborativa se estimó en
13.500 millones de euros. Estos sectores son: crowdfunding y préstamos persona
a persona, coches compartidos y consumo de música y video online. Para 2025, la
cifra de ingreso de esos cinco sectores se estima en 300.000 millones.
Y si comparamos el
ingreso de esos cinco sectores con el de cinco equivalentes en modelos
tradicionales (alquiler de equipamiento y herramientas, hoteles y hostales,
alquiler de libros, alquiler de coches y alquiler de DVD y discos, observamos
que éstos en 2013generaron 215.000 millones de euros, mientras que para 2025 se
estiman 3000.000 también. Por tanto, en un caso el crecimiento va de 13.500 a
300.000 millones, en el segundo, de 215 a 300. Parece evidente dónde está el
potencial.
De
estos nuevos sectores, los que más contribuyen al crecimiento actual de la
economía colaborativa son:
·
Crowfunding
y préstamos persona a persona +63%
·
Selección
y asignación de personal online + 37%
·
Alojamiento
persona a persona +31%
·
Coche
compartido +23%
·
Consumo
de música y vídeo online +17%
Hace
no mucho tiempo, justo antes de la
revolución digital, las máquinas
fotocopiadoras crearon mucho recelo y polémica en la industria del libro, por
la amenaza que suponía la copia de sus obras. Desde mi perspectiva actual esta
situación resulta incluso graciosa, pero ilustra a su vez cómo la novedad e
innovación, independiente de su viabilidad e impacto, siempre genera
controversia; sucede con cualquier cambio del statu quo.
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