Jerónimo David Álvarez García
La
inestabilidad socio-política de la España decimonónica, no fue obstáculo para
que legara importantes figuras. En el país de la Restauración ocuparán un lugar
preeminente, Sagasta y Cánovas, Sorolla y Zuloaga, Albéniz y Falla, Juan Valera
y Pérez Galdós y los eminentes Santiago Ramón y Cajal e Isaac Peral. Canarias
está inmersa en los primeros pasos del turismo industrial, las confrontaciones
de la división provincial (1) y el Caciquismo, que generará variopintas
disputas políticas. (2) Estas rivalidades, de las que Realejo Alto es un claro
exponente, no restan interés a esas visiones cuasi románticas que eruditos o
viajeros, dejaron de nuestros pueblos:“los dos Realejos, el Alto y el Bajo, son
pueblos, aunque no muy grandes, ricos y de muy buenos edificios; sacados
algunos caballeros, los demás son labradores.” (3) Leopold von Buch, aporta una
visión técnica en 1815, cuando describe “los grandes acantilados, que bordean
el mar por debajo de Los Realejos, cerca del molino del Gordaxuelo, también
ofrecen declives inmensos donde es fácil estudiar rocas diversas. En ese punto,
los estratos de basalto sólido alternan tres veces con otros formados por
trozos negros, escoriformes y sin coherencia entre ellos."(4) La consolidación social del municipio queda
patente en sus tradiciones, pues a “ finales del siglo XIX, el derivar popular
en el que se encontraba inmersa la Romería en honor a San Isidro Labrador y
Santa María de la Cabeza parece detenerse, al tiempo que se recupera la
preponderancia religiosa de la celebración, (…) aún así, es precisamente en el
año 1889 cuando estas fiestas son reconocidas oficialmente por el Arciprestazgo
de Taoro como las principales fiestas del municipio.” (5)
El año 1888
finalizó con restitución de don Isidro Oramas y Chaves(6) como alcalde de
Realejo Alto, (7) insuficiente elección para enfriar la tensa situación
política, (8) como reflejan los rotativos insulares.(9) Pasemos breve revista a
los acontecimientos socio-políticos: Primeramente, se dará cuenta de la
publicación por el Boletín Oficial de la Provincia de la convocatoria para la
renovación, del 27 al 30 de enero, de los cinco concejales que por ministerio
de la ley cesaron en su cometido en junio de 1887, asentándose en acta dicha
disposición. Se publicita la vacante de la plaza de secretario municipal, (10)
mientras la Comisión Provincial previene a varios ayuntamientos canarios, entre
ellos Realejo Alto, para que remitan un ejemplar de las filiaciones de los
mozos ausentes en Ultramar. De igual forma, se comunica al alcalde realejero
que no procede levantar el embargo de los bienes y rentas contra el municipio,
posponiéndose para su estudio el expediente sobre incapacidad de los actuales
concejales.(11)
A principio
de febrero se elabora la lista de contribuyentes: (12) El primer puesto
corresponde a don José Leal y Leal con
575,02 pesetas, seguido por don Eliseo González Espínola con 563,13 pesetas,
don Pedro Rodríguez de la Sierra (13)
con 403,35 pesetas, don Francisco García Oramas con 241,68 pesetas y don
Agustín Chaves Albelo con 234,93 pesetas. (14) Los 171 primeros
componentes reúnen la capacidad de ser
electores y elegibles,(15) los restantes hasta el 207 son únicamente
electores.(16) Los últimos puestos los ocupan don Ángel Fernando Barreda
Hernández, párroco de Santiago,(17) don Agustín Rodríguez Yumar, capitán
retirado, don Domingo Suárez Albelo, secretario municipal (18) y don Gaspar
Arocha y Casanueva, (19) profesor de Instrucción Primaria. La Comisión
Provincial, conmina al alcalde realejero con multa de 100 pesetas, que se hará
efectiva “si a vuelta de correo no remite” el certificado de recaudación de la
segunda quincena de enero. (20) Esta comisión acusa recibo de las instancias
dirigidas por varios vecinos ante ella y el Gobierno Civil, en queja de la conducta
observada en la mesa constituida el 27 de enero para la elección de concejales,
solicitando su nulidad. (21) En el proyecto de presupuesto económico para el
ejercicio 1889-1890, los gastos ascienden a 14.691,65 pesetas y los ingresos a
2.890,92 pesetas lo que genera un déficit de 11.800,73 pesetas “que se cubrirán
con los recursos legales del capítulo noveno de dicho presupuesto”.(22) El guarda local abre expediente a diversos
vecinos por sustracción de carbón.
En la sesión
municipal de 17 de marzo se nombra alcalde por mayoría a don Isidro Oramas y
Chaves. La primera tenencia de alcaldía recae en don José Luis Pérez, la
segunda en don Guillermo Albelo Pérez y regidor síndico don José Borges Fregel.
El resto del cuerpo de concejales lo forman don Andrés de Mesa y Delgado, don
Narciso Luis García, (23) don José García Pacheco, don Cipriano Álvarez Moreno,
don Cristóbal García Acosta y don Domingo Espinosa. En este acto son designados
los alcaldes de barrio o pedáneos; para las Rosas se nombra a don Santiago
García Pacheco, para la Cruz Santa a don José Méndez Felipe y por la
Carrera-Gorvorana a don Domingo Pérez y González.
Son aprobadas
las cuentas de fábrica(24) de la Parroquia de Santiago que remitió al obispado
su regente, don Ángel Fernando Barreda Hernández. (25)
La autoridad
competente ordena a la alcaldía ingresar en las arcas provinciales, en un plazo
de tres días, 518 pesetas en poder del depositario a cuenta del embargo
practicado contra las rentas de aquel Ayuntamiento (26). El Boletín Oficial
notifica a los municipios de Realejo Alto y Garachico los artículos que serán
gravados para cubrir el déficit. (27) Según informe municipal, a esa fecha las
fuerzas productivas del municipio ascienden a 1.263 habitantes, (28) “la quinta
parte son mayores de setenta años y menores de doce, que nada producen,” a la
vez que “siendo un pueblo agrícola con muchos caminos y pagos es difícil
establecer una vigilancia, sobre ese
impuesto”. Estos serán los argumentos esgrimidos ante la Delegación de
Hacienda, para rechazar el cupo de consumo y sal (29)que correspondía al pueblo
en los Presupuestos Generales del Estado y el Censo de 1877. (30) En los
reemplazos de mozos es declarado “útil condicional” Domingo Hernández, se
exceptúa temporalmente a Teófilo Luis y se excluye totalmente a Cipriano Méndez
y Cipriano Arbelo. (31)
Las
autoridades provinciales levantan el embargo municipal, (32) mientras se abre
expediente a don Miguel Chaves Albelo (33) como recaudador del impuesto de
cédulas personales, a quien se exige ingresar las cantidades por él retenidas.
Se habilita al maestro de Primera Enseñanza, por los conceptos de nómina,
material y alquiler para el primer trimestre del curso. (34) La municipalidad
informa al Gobernador Civil, que prosiguen las gestiones para imponer un
arbitrio extraordinario sobre los artículos de consumo no tarifados. (35) En
cumplimiento de la legislación electoral la distribución de los distritos
electorales es la que sigue: Distrito Primero, colegio primero: Casco, que
comprende la calle de la Alhóndiga, plaza de la iglesia, calles del Medio y del
Sol, del Agua, Callita, adyacentes de Toscas de Romero, San Benito y Horno.
Distrito Primero, colegio segundo: Barrio de San Agustín, Caseríos del
Patronato, Carrera, Montañeta, Burgado, Zamora, Gorvorana, Longuera y Méndez.
Distrito Segundo con un colegio único: Pago de la Cruz Santa, Caserío de la
Cartaya, Zamora, Piñera, Mocán y pago de
las Rosas (que abarca los caseríos de Florida, Placeres, Traviesa, Madroño,
Hoya de Pablo, Palo Blanco, Llanadas,
Treviña, Mollero, Hoya de Farrais y
Ferruja).
Es nombrado
juez municipal de Realejo Alto don José del Carmen Pérez, (36) al tiempo que la
prensa deja constancia de la marcha hacia el pueblo, con objeto de pasar la
temporada de verano, de don José Suárez Guerra subdelegado de Farmacia de
distrito. (37) En agosto se constituye La Junta Municipal (38) integrada en su
sección territorial por don Juan Yanes García, don Felipe Siverio Hernández,
(39) don Carlos Hernández Pérez, don Miguel Hernández Albelo y don Felipe
Hernández González. La sección industrial es ostentada por don Estanislao
Fragoso García (40) y la sección de no
contribuyentes por don Vicente Hernández Siverio, don Celestino Chaves y Luis,
don Leonardo García Pacheco, don José Luis de la Guardia González y don Juan
Espinosa y Espinosa. Según consta en acta de sesión municipal, el vecino don
Pedro Quintero Rodríguez solicita al Gobierno Civil la destitución de la
Corporación por estar ilegalmente constituida, se desestima la petición por
improcedente.
Con el
comienzo del curso se publican las estadísticas parroquiales, de las que se
desprende que el número de confirmaciones asciende a 704 y las comuniones a
954, la muestra del estudio englobó a 734 vecinos. (41) Siguiendo órdenes
telegráficas del Ministro de la Gobernación al Gobierno Civil, es destituido y
denunciado, el alcalde y concejo que constituyen el ayuntamiento realejero.
(42) Mientras, en sesión de 23 de septiembre se reúnen los concejales interinos
nombrados por el Gobernador Civil para ocupar los puestos de propietarios,
destituidos por la nombrada autoridad superior, estos toman posesión ante el
juez municipal. Es elegido alcalde don Eliseo González Espínola (43) y“se
extiende un acta que se agregará al libro de actas cuando se tenga.” (44) Pero
debido a “la mal interpretación de telegramas del ministro” se ordena restituir
al anterior y legítimo gobierno municipal, (45) de lo cual deja constancia esta
nota periodística:“Después de copiar un suelto, con la noticia de que en el
Gobierno Civil se habían recibido nuevas órdenes telegráficas del Ministro de
Gobernación disponiendo se dejara sin efecto la destitución de los Concejales
del Ayuntamiento del Realejo-Alto, decretada dos días antes por el mismo Sr.
Ministro, escribe nuestro querido cofrade El Memorándum lo siguiente: "El
estimado colega nos permitirá una rectificación y una aclaración. La
rectificación: que el Gobierno no ha decretado la destitución del Ayuntamiento
del Realejo-Alto. El Gobierno sabe que no puede decretarla ni respecto a ese
Ayuntamiento ni respecto a ninguno otro; que eso, cuando procede, corresponde a
los tribunales. La destitución no ha podido decretarla nadie más que el Sr.
Antón, que está tan fuerte en derecho administrativo como en lengua árabe”. (46)
La sesión del
pleno da cuenta del falseamiento de las listas electorales, por lo que el
Gobierno Civil restituye la Corporación anterior, retomando la alcaldía don
Isidro Oramas en 13 de octubre. La orden obliga al Consistorio a ultimar dichos
listados por no formularse con arreglo a la Ley, por el alcalde saliente. (47)
Las intrigas políticas son evidentes, pues tras la restitución de los
concejales, un alto oficial del Gobierno Civil se entrevistará con don Eliseo
González, cabeza de la oposición. (48) El restablecido ayuntamiento,
incondicionalmente tinerfeño había sido de muy atrás, objeto de la ira de las
fuerzas fácticas. El señor Espínola,
alcalde intruso como lo calificó la prensa tinerfeña, pretendió reformar
en su fugaz reinado de quince días, las listas contra las cuales no se atrevió
a reclamar en el plazo en que estuvieron expuestas al público. Intentó amañar
unas nuevas listas en las que alteró los nombres de los votantes. Pero la
táctica de don Eliseo fracasó, aún apoyado por las instituciones capitalinas
que intentaban desestabilizar a la municipalidad norteña por ser afecta a los
intereses de Tenerife. Prosigue el rotativo, que “este cacique de menor cuantía
en tierras del Realejo” no piensa en otra cosa que en “sentar su planta” en el Ayuntamiento,
valiéndose al efecto de todos los medios menos el de acudir a los comicios.
(49)
El Gobierno
Civil recibe la instancia presentada por don Isidro Oramas Chaves y otros
concejales de Realejo Alto, suplicando que dicha autoridad se inhiba, para que
cesen los procedimientos ante el Tribunal que perita la causa, que contra ellos
se sigue por malversación de caudales públicos; se desestima. (50) El día
primero de diciembre se celebran elecciones municipales, en tanto la prensa informa cómo tuvo lugar el
escrutinio de interventores, sin que el poderoso partido leonino de don Eliseo
González Espínola se dignase tomar parte en la función electoral. Don Isidro
Oramas nombró parcialmente a los interventores en los colegios, a fin de que
“los leoninos de Espínola” pudieran intervenir en la elección sin achacar su
derrota. Esta prudente conducta se puso en conocimiento de los simpatizantes
del Señor Espínola con la antelación oportuna, quien no acudió al acto de las
elecciones que tuvieron lugar el domingo. (51)
Se publica la
relación de los descubiertos con que figuran los pueblos de esta provincia, por
obligaciones de Primera Enseñanza correspondientes al año económico 1888-1889:
Realejo Alto, posee un importe anual de
las obligaciones de 3.691,25 pesetas, siendo sus ingresos verificados de 2.947,87 pesetas, lo cual genera un déficit
de 743,38 pesetas. (52)
El enésimo
despacho periodístico ilustra la sinuosa vida política local: Las últimas
elecciones municipales en Realejo Alto, en las que no osaron tomar parte las
reducidas huestes leoninas que acaudilla el eterno aspirante don Eliseo
González Espínola, son anuladas por la mayoría de la Comisión Provincial, pues
de los tres colegios electorales existentes, una sola protesta presentada en el
del casco del pueblo, protesta sin uso de razón ni fundamento, ha bastado a la
“Comisión Leonina” para anular toda la elección. El gobierno actual ha dicho
que el legítimo Ayuntamiento es el que, actualmente en funciones, preside don
Isidro Oramas, pues el mismo Gobierno y el Consejo de Estado, recuerdan que los
débitos municipales no constituyen causa de incapacidad para los concejales;
pero aun así, la Comisión Provincial de Canarias sobreponiéndose a órdenes superiores, considera incapacitado al
actual Consistorio y ha anulado estas elecciones.(53)
Se constata
nuevamente, tanto por la documentación oficial, como las referencias a la
prensa histórica, bibliografía y las reseñas biográficas, la consolidación de
la burguesía agraria y la conflictiva situación de la política realejeras. El
último cuarto de siglo, representado en los nombres de don Eliseo González
Espínola y don Isidro Oramas y Chaves, comienza su declive en sus mismas
personas, tanto por fallecimiento como por avanzada edad, respectivamente. Así,
tras la aparición en la escena pública de nuevos personajes ligados a una
incipiente burguesía comercial o sociológica, se sentarán las bases
político-económicas y sociales de principios del siglo XX en Realejo Alto.
Foto 1.
Antigua vista de Los Realejos. ARCHIVO MUNICIPAL DE LOS REALEJOS/MELCHOR HERNÁNDEZ CASTILLA.
Foto 2. Calle
de la Alhóndiga de Realejo Alto. ARCHIVO MUNICIPAL DE LOS REALEJOS.
NOTAS
1. Fernando León
y Castillo (1842-1918), político canario, ministro y embajador, reivindicó la
división provincial de Canarias, pero los políticos tinerfeños ganaron la
pugna, hasta que se vio quebrada en 1927 con las directrices del general don
Miguel Primo de Rivera. La prensa tinerfeña apodaba a sus seguidores “los
leoninos”.
2. Si no se
indica lo contrario, los acuerdos municipales se han transcrito de Libro de
Actas donde toma sus acuerdos este ilustre Ayuntamiento año 1888-1889
(01.07.1888-03.02.1889), Libro de Actas del Ayuntamiento de Realejo Alto
(07.02.1889-30.06.1889) Sign. 13/2 COD. A.1.1.3 y Libro de Actas del
Ayuntamiento de Realejo Alto. (07.07.1889-29.06.1890) Sign. 13/38 COD. A.
1.1.3. Archivo Histórico Municipal de Los Realejos, en adelante A.H.M.R.
3. Espinosa,
Alonso de, Historia de Ntra Sra. de Candelaria, p. 123.
4. Buch, Leopold
von, Descripción física de las Islas Canarias, p. 35.
5. Hernández
Hernández, Jonás y Hernández Hernández, José, Fiestas de Mayo en Los Realejos,
pp.52 y 53.
6. Representante
de la pequeña burguesía realejera, residía en la calle del Medio, alcalde de
Realejo Alto en varias ocasiones y juez municipal (02.08.1897-31.07.1899),
falleció en 1916 a los 85 años. Los datos biográficos de los protagonistas han
sido recopilados de los índices y libros de defunción correspondientes del
Juzgado de Realejo Alto, Juzgado Municipal de Los Realejos, padrones
municipales de los años pertinentes depositados en el A.H.M.R y Fernández
Bethencourt, Francisco, Nobiliario de Canarias, t. 4.
7. Para una
introducción a la Historia de Los Realejos, cfr. AA.VV, Los Realejos. Una
Síntesis Histórica y Arbelo García, Adolfo, La Burguesía Agraria del Valle de
La Orotava (1750-1823).
8. Véase, Álvarez
García, Jerónimo David, Aproximación a la vida cotidiana de Realejo Alto hacia
1887, La Prensa-EL DÍA, 19.01.2014 y Álvarez García, Jerónimo David,
Aproximación a la vida cotidiana de Realejo Alto hacia 1888, La Prensa-EL DÍA,
12.10.2014.
9. La Opinión.
Sta. Cruz de Tenerife. 05.01.1889. Biblioteca Universidad de La Laguna. BULL.
10. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife.22.01.1889.BULL.
11. Diario de
Tenerife Sta. Cruz de Tenerife. 23.01.1889,
pp. 1 y 2. BULL.
12. Los primeros
puestos de esta relación los ocupaban las personas de mayor renta y los últimos
los personajes con mayor prestigio social y/o nivel cultural.
13. Gran
propietario de la burguesía agraria realejera y vecino de la calle del Medio.
14. Estas
cantidades difieren del Padrón Vecinal de Realejo Alto de 1889, en el que el
primer puesto lo ostenta don Eliseo González Espínola. Si se analiza a los
mayores propietarios de Realejo Alto con sus homólogos de Realejo Bajo, se
aprecia que el reparto de la propiedad era más equitativo en el primer
municipio, ya que en el vecino pueblo, los
dos primeros contribuyentes, a saber, don Pedro Melo Hernández y don Celedonio
Camacho Pino, oscilaban en tasas de 1.343 pesetas cada uno. Millares Cantero,
Agustín y otros, Historia Contemporánea de Canarias, p.65.
15. Entre ellos se
encuentra don Estanislao Fragoso García con 26,89 pesetas, don Miguel Chaves
Albelo con 22,03 pesetas y don Isidro
Oramas Chaves con 14,73 pesetas.
16. Sus cuotas
oscilaban entre las 2,15 pesetas y las 0,51 pesetas.
17. Natural de
Puerto de la Cruz, era propietario agrícola en el Patronato, regentó la
parroquia de Santiago de 1878 a 1918 siendo el segundo mandato más prolongado
de los últimos 266 años. El primer lugar lo ocupa el Dr. D. Agustín García de
Chaves (1748-1803), orador, benefactor que fue de la Parroquia y caballero de
la Noble Esclavitud de San Juan Evangelista de La Laguna. El tercer puesto
recae en don Antonio Hernández Oliva (1981-2013), en cuya regencia se
efectuaron gran parte de las restauraciones contemporáneas. Entre los más
célebres párrocos de Santiago del Realejo, destacaremos a Rodrigo de Villalobos
que fue beneficiado de 1536 a 1557, aunque residió en Castilla, pues era
capellán de la Corte del Emperador Carlos V, lo que provocó la airada protesta
de la feligresía del Realejo de Arriba por su dilatada ausencia. Santana
Rodríguez, Lorenzo en “El Tríptico de Santiago del Realejo, Aislados, Año III,
El Mundo, 18.02.2000”.
18. Casó con doña
Juana Arocha y Casanueva.
19. Vecino de la
Cruz Santa, falleció el 02.06.1896 a las
38 años de edad.
20. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife. 06.02.1889. BULL.
21. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife 14.02.1889. BULL.
22. Según Ley de
Municipios de 1845, título VII, Del presupuesto municipal, Art.101.
Enciclopedia Jurídica Española, Francisco Seix, edt, que reza: “Si el producto
de los ingresos ordinarios y extraordinarios no bastase a cubrir el presupuesto
de gastos obligatorios, se llenará el déficit por medio de un repartimiento o
arbitrio extraordinario que el Ayuntamiento propondrá a la aprobación del
Gobierno”.
23. Propietario y
vecino de la Cruz Santa.
24. Correspondería
a la contabilidad actual.
25. Boletín
Oficial Eclesiástico del Obispado de Tenerife. La Laguna. 18.03.1889. BULL. El
Padrón Municipal de 1889 del Ayuntamiento de Realejo Alto, A.H.M.R aporta la
identidad del sochantre, a la sazón don Salvador González Albelo, vecino de la
plaza, propietario y recaudador.
26. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife. 11.03.1889. BULL.
27. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife. 21.03.1889. BULL.
28. La
desaparición del clero rentista, el aumento del campesinado jornalero (que
emigró a América y constituyó la mano de obra para implantar regadíos y
plataneras) y la concentración de la riqueza en manos de la burguesía agraria
local, definen el panorama social de la época, en AA.VV, Los Realejos. Una
Síntesis... p. 97
29. Antes de la
generalización del mantenimiento de alimentos por refrigeración, el uso del
salado como conserva conllevó a elevadas tasas de cáncer del aparato digestivo,
el avance de la congelación disminuyó estos índices.
30. En el Archivo
Histórico Provincial de Tenerife, Fondo INE, Sign. 1083 y 1084, “Censo de la
Población de España en 1887”, Provincia de Canarias, constan los datos
demográficos de Realejo Alto, desprendiéndose que la población ascendía a 3.658
habitantes (1.662 hombres y 1.996 mujeres, reflejo de la emigración masculina a
América), de estos 2.448 eran solteros, 1064 casados y 146 viudos, mientras que
176 personas sabían leer y 3.056 no lo hacían.
31. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife. 05.04.1889. BULL.
32. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife. 11.05.1889. BULL.
33. Alcalde que
fue de Realejo Alto, propietario y vecino de la calle del Medio, casó con doña
Cosmelina Pérez-Zamora, falleció el 24.12.1917.
34. El Auxiliar,
Sta. Cruz de Tenerife. 06.05.1889. BULL.
35. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife. 16.05.1889.
BULL.
36. La Opinión.
Sta. Cruz de Tenerife. 10.06.1889.BULL. Figura en el listado de hermanos de la
Cofradía de Ntra. Sra. del Carmen de 1867. Hernández García, José Javier, Los
Realejos y la imagen de Ntra. Sra. del Carmen, p.160.
37. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife. 31.07.1889. BULL.
38. Equivalía a
las Comisiones Municipales actuales, pues tenía función de asesoramiento.
39. El
investigador realejero Juan Carlos Ramírez ha indagado en la genealogía del
apellido Siverio en su trabajo“El origen del apellido Siverio en el Realejo
Bajo”, (conferencia impartida en la Casa de la Cultura y Casino Realejos el
pasado año). Puesto que sus estudios aún se circunscriben a este antiguo
municipio, cabe recordar que algunas ramas Siverio y/o Hernández-Siverio, residían
en San Agustín y la Carrera, jurisdicción de Realejo Alto, incluso en el casco
del pueblo, como ejemplo se citará a los hermanos, Angelina, Santiago, Rosario,
Dolores, Isidro, Agustín y José Hernández Siverio, vecinos del Camino de San
Benito, según se desprende del “Padrón Municipal de Vecinos de Realejo Alto de
1915”.A.H.M.R. También se advierte que los Hernández-Siverio aún poseen
antiguas sepulturas en el Cementerio de San Agustín.
40. Alcalde que fue
de Realejo Alto, comerciante y vecino de la Cruz Santa, viudo, casó en segundas
nupcias con doña Candelaria Armas de la que también enviudó. Falleció en
21.03.1901 a la edad de 70 años.
41. Boletín
Oficial Eclesiástico del Obispado de Tenerife. La Laguna. 04.09.1889. BULL.
42. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife 23.09.1889. BULL.
43. Vecino de la
calle de la Alhóndiga, una de las mayores fortunas del municipio y partidario
de la división provincial, ostentó la alcaldía en numerosas ocasiones durante
el último tercio del siglo XIX. Casó con doña María Candelaria Bonifacia de
Zárate y Morales. Diversas fuentes orales señalan que doña Candelaria y sus
hermanas solteras Luisa, Felisa y Eladia, habrían ejercido en las postrimerías
de siglo y principios del siguiente como Camareras de la Virgen de los Remedios,
este dato no se ha constatado documentalmente por aplicación de la Ley de
Protección de Datos vigente. Es importante señalar que Ntra. Sra. de los
Remedios ostentaba el título de “Patrona de este pueblo”, según reza en Libro
4º de Sesiones del Ayuntamiento de Realejo Alto, acta de 12.09.1929, p. 68.
A.H.M.R.
44. Se aprecia en
el libro de actas correspondiente, la diferencia de textura del papel de este
acta con la de las restantes.
45. La Opinión.
Sta. Cruz de Tenerife. 30.09.1889. BULL.
46. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife. 04.10.1889. BULL.
47. Diario de
Tenerife. Sta. Cruz de Tenerife.17.10.1889. BULL.
48. La Opinión.
Sta. Cruz de Tenerife. 05.10.1889. BULL.
49. La Opinión.
Sta. Cruz de Tenerife. 05, 15 y 20.11.1889. BULL.
50. Diario de Tenerife.
Sta. Cruz de Tenerife. 25.11.1889. BULL.
51. La Opinión.
Sta. Cruz de Tenerife. 05.12.1889. BULL.
52. El Auxiliar.
Sta. Cruz de Tenerife, p.348. 22.12.1889. BULL.
53. La Opinión.
Sta. Cruz de Tenerife. 31.12.1889. BULL.
Publicado en La Prensa-El Día el 18 de enero de 2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario