ESTACIÓN VALENTINA

He recibido de Carmen Felipe Martell, el siguiente escrito:

Una marca de moda inclusiva en Canarias. La historia de una superación.

Un proyecto inspirado en la obra literaria “Valentina en cada estación” de Pilar Aguilar García.

He conocido a Pilar.

No, no he conocido aún a Pilar, no al menos, personalmente.

Y aún así, creo haber conocido mucho de ella, de su interior, de sus pasiones, de su trabajo y, especialmente, de su ambicioso proyecto de Inclusión Social. He conocido una importante parte de lo que hace latir su corazón.

En el día de La Madre, ella nos quiere contar a todos su Proyecto, un precioso y generoso proyecto que, partiendo del imborrable recuerdo de su madre, ha diseñado para hacerle a ella su particular homenaje.

Pilar ha dejado su precioso y emblemático pueblo extremeño de Mérida para, siguiendo los pasos de su madre nacida en Tejeda, crear en Canarias un entramado tal, que despierte nuestras conciencias y nos devuelva el espíritu solidario de apoyar a los más desfavorecidos por la naturaleza, la biología, la larga y agotadora crisis económica o cualquier otra situación social.

Y el proyecto de Pilar, no es un proyecto de ayuda económica que se agotaría antes de restablecer el orden de las cosas. Hablamos de la creación de una cadena de acciones de inserción profesional.

Pero será mejor que nos lo cuente ella misma.

Pilar Aguilar García

Escritora y Trabajadora social:

Estación Valentina es un concepto creado a partir de mi propia historia de superación personal, es  un proyecto diseñado para transmitir,  y crear espacios de aprendizaje y encuentro en entornos de conocimiento y actividad definidos a partir de mi propia experiencia personal y profesional.

Estación Valentina es el resultado de un proceso de reconstrucción personal en el que deseo dejar mi legado creativo y de aprendizaje y crecimiento personal, creando espacios de actividad, aprendizaje y conciencia social a partir del personaje central, Valentina, la mujer que decide recorrer su propio camino y que recreo en los pasajes de mi última novela: “Valentina en cada estación” de Ediciones Carena.

Mi experiencia en el ámbito de los programas de acción social en las instituciones y mi amor por el mundo de la moda y el diseño, me llevaron a construir un concepto generado a partir del deseo de desarrollar espacios de sensibilización y conciencia solidaria en torno a aquellos colectivos más desfavorecidos, excluidos y aislados de ciertos espacios de mercado. Estación Valentina se presenta como ese punto de encuentro entre el mundo de la moda y la acción social, espacio que deseo llenar con este proyecto, haciendo visible la acción integradora de entidades sin ánimo de lucro y llevando hasta ellas una Marca Inclusiva.

El cometido de Estación Valentina es abrir espacios de aproximación, aprendizaje y encuentro entre estas entidades, el mundo de la moda y las instituciones, encargadas estas últimas de la acción protectora y de reconocimiento de  derechos sociales.

Estación Valentina llega a Canarias con el deseo personal de dejar mi semilla y legado en esta tierra, en la que he pasado preciosos momentos y a la que me une un fuerte vinculo sentimental, tierra de mi madre, Jerónima García Torres.

A ella de manera especial, le dedico este legado y esta obra que nace de mi propia vida y que tiene como destinatarios a aquellos más frágiles, en un intento de crear oportunidades para quienes menos posibilidades tienen en el mundo de la moda, y haciéndolo más humano, solidario e igualitario.

Pilar tiene por delante un camino largo y cansado para conseguir los necesarios apoyos para que su maravillosa forma de ayuda a los demás, tenga cabida en un mundo en el que impera la ley del más fuerte, pero también sabe de las dificultades que debe superar a diario el pueblo canario por su especial situación geográfica, lo que le hace un pueblo luchador a la par que sensible a los problemas de los demás.

Ella ya sabe que cuenta con todo mi apoyo emocional, personal y profesional para hacer posible su sueño.

¿Contará también con el tuyo?

¡ADELANTE, ESTACIÓN VALENTINA ¡