Francia Elena Martínez
Se abrillanta el día
con tu dulce despertar,
el cerúleo éter se cubre,
con aves, al volar…
y yo siento en mi alma
campanas repicar.
Es que yo sé que me amas
de aquí a la eternidad
y siento una alegría grande
que no logro explicar,
mi corazón se expande
a punto de estallar.
Yo sé que estás en mi vida
y en la tuya yo estaría,
sintiéndome más humana
con la liviandad de mi alma,
al pregonar todo el tiempo
este amor que llevo dentro…
como llama que no apaga
No hay comentarios:
Publicar un comentario