Esteban
Domínguez
¿Cada día nos preguntamos, como llamaremos ahora la calle
Guillermo Camacho?
Le vendría muy bien “calle
la cremallera”. Obras dicen que son amores, pero una cosa son obras, y otra cosa
desesperación.
Hace pocos días hemos visto como alguien consultaba planos y
tomaba fotografías.
Los vecinos están artos, y sobre todo los que viven cerca de esta
zona. ¿Culpables? `Pues yo no me atrevo a señalar con el dedo a nadie porque
desconozco estos menesteres, pero desde el consistorio realejero de debe de
acelerar y pisar a fondo, con el fin que esta pesadilla finalice cuanto antes.
Son muchas las molestias causadas, y el tiempo corre a toda prisa.
Mientras tanto algunos dicen que estarán terminaran para las próximas
navidades, otros para el año nuevo, en fin… cada cual opina a su manera, y hay
quién dice que se puede sacar petróleo, y axial el Señor Soria se quitaría u n
pero de encina.
Y termino: ¿que pasa el C.C. en Los Realejos? Don Oswaldo se nos
va, Doña Luisa Salazar también, y Don José Vicente del barrio del Icod el Alto,
a sembrar papas bonitas que está a buen precio. En fin. La política es como un
arado, que hay que saberlo llevar.
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