Javier Lima Estévez. Historiador
En el contexto del imparable boom turístico experimentado
por la ciudad de Puerto de la Cruz entre finales de los años sesenta e inicios
de los setenta del pasado siglo XX, destaca la presencia del Festival de la
Canción del Atlántico, cuyo primer certamen se desarrolló durante el mes de
febrero del año 1966 en las instalaciones del recordado Lido San Telmo. A
partir de su cuarta edición sería conocido como Festival Internacional de la Canción
del Atlántico, elevando notablemente la calidad artística mediante actuaciones
de primer nivel en el plano nacional e internacional de la música. En ese
contexto, y, concretamente, en el año 1970, llegó hasta el núcleo portuense el
cantante español con mayor proyección internacional de todos los tiempos: Julio
Iglesias. Un artista que, como se ha destacado en múltiples ocasiones, se
inició en la música tras su temprana retirada del mundo futbolístico como
consecuencia de un accidente automovilístico. En 1970, pese a su juventud, ya
había obtenido diversos reconocimientos a su trayectoria. En 1968, por ejemplo,
obtuvo el primer premio en el Festival de la Canción de Benidorm con su tema La
vida sigue igual. Ese acontecimiento representaría el inicio de una carrera
meteórica como intérprete y compositor, marcando un estilo propio a través de
una voz muy característica. Además, esa inicial carrera musical encontraría un
nuevo impulso a través de su actuación como representante español en el
Festival de la Canción de Eurovisión de 1970, interpretando su exitosa balada
Gwendolyne.
En el marco de la quinta edición del Festival Internacional
de la Canción del Atlántico sobresalió la actuación de Julio Iglesias. Su
llegada a la isla no fue nada fácil. Tras intensas y complejas negociaciones
por parte de los responsables del certamen, lograría actuar en el escenario del
Parque San Francisco el viernes 17 de abril de 1970, deleitando a los presentes
con un interesante repertorio musical acompañado por el popular trío La, La,
La. El público, respondió de forma entusiasta a la presencia del cantante
español, abarrotando por completo el espacio para observar y tatarear las
letras de la gran atracción musical para esa edición. Su presencia en Canarias
obedecía, además, a la presentación en Las Palmas de Gran Canaria de su
película autobiográfica La vida sigue igual. El laureado artista asistió a
diferentes ensayos, admirando las canciones presentes en el festival portuense,
llegando a mostrar su interés y sorpresa al observar que «poseen una auténtica
calidad», según llegaría a afirmar en el marco de una entrevista concedida al
periodista Enrique Martín Braun para el periódico “El Día”, en su edición del
19 de abril de 1970, generando la presencia del popular cantante múltiples
entrevistas y declaraciones en el ámbito de la prensa insular.
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| Foto del Archivo Municipal Puerto de la Cruz |
Tras actuar en el Puerto de la Cruz, Julio Iglesias se desplazó nuevamente hasta la capital grancanaria. Allí cantó durante el sábado y el domingo, según explica en el transcurso de una interesante entrevista a la periodista Marisol Ayala en el periódico “El Eco de Canarias”, con fecha de 15 de abril de 1970.
Un artista con una trayectoria única en el panorama
internacional. Una figura cuya presencia aún sigue siendo muy recordada y
añorada por todas aquellas personas que acudieron hasta el Puerto de la Cruz
aquella tarde/noche primaveral del año 1970. La penúltima edición de un
festival musical en el que Julio Iglesias demostró ante los presentes su
indudable calidad artística.
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