¡A TOMAR POR CULO!

Lorenzo de Ara

El otro día, un periodista llorón, al que se le terminó el chollo de pontificar en la Cuatro todas las mañanas, aseguró que en la calle hay una guerra. ¿Verdad o propaganda? El chisgarabís creyó a pies juntillas que su periodismo es el que necesita España para vivir en democracia. En libertad. El mentecato al servicio de la izquierda que avasalla desde la supuesta superioridad moral se atrevió a sentenciar que con el cierre del programita, España entraba en un agujero negro llamado tele basura, periodismo al servicio de la mentira.

¿Y qué es la Cuatro, la Sexta en el periodismo español? ¿Saben ustedes (qué sabrá ese mamón de tres al cuarto) que el periodismo hecho en España es de lo peor de Europa? Sí, ya sé que están los ingleses, pero ellos por lo menos asumen que tienen prensa hecha con la peor mierda, que la leen, y que primero la compran. Pero aquí,  en un país de catetos, con una izquierda venenosa y una derecha para tirar al cubo de la basura cuanto antes, ningún periodista está en condiciones de dar lecciones de trabajito objetivo y, menos aún, de profesional sin carné en la boca. (En el Puerto de la Cruz hay uno que no calla ni deja de escribir a pesar de que con el paso de los años hace el ridículo siempre que abre la boca para gustarse o se afana intentado juntar letras para sermonear a las marmotas analfabetas funcionales que le pasan la lengua por la calavera).

¿Cómo se llama ese cabroncete de la Cuatro al que apartan de la parrilla porque en definitiva es un don nadie? No me acuerdo. Escribo rápido y no perderé el tiempo buscando en Google.

Que le den por saco al llorón y a todos los que son como él.

Y si lo que viene tras la patada en el culo al charlatán, es un programa de carne, pornografía y encefalograma cero para continuar propagando la basura en una sociedad ya de por sí vacía de casi todo lo que es importante, pues nada, al pueblo lo que es del pueblo.

El periodismo, también el que se hace en el Puerto de la Cruz, es una  prolongación de la mala política que tenemos. Punto. El que se hace en Santa Cruz es un ejemplo más del avanzado estado de putrefacción que padece la profesión.

El periodismo es cutre, pueril, lameculos.

No hay más.

Ah, sí; ese muchacho de la Cuatro asegurando que con él desaparece la libertad, la imparcialidad, el periodismo de trinchera, no es otro cosa que un Pinocho que de periodista tiene lo que yo de titulado en no sé qué.

A él, y a los que son como él (también en el Puerto de la Cruz), a los que desde la profesión llevan años enseñando con insultante chabacanería que son superiores al resto porque son la izquierda ilustrada.

(jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajjajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajjajaja. Ja), lárguense todos a tomar por culo.

Repito: ¡A tomar por culo!