Bienvenidos al Diario del Valle

SEARCH

viernes, 15 de noviembre de 2013

MATRIMONIOS BIEN AVENIDOS

Evaristo Fuentes Melián

No hay que llegar ni mucho menos al extremo del terrible chiste de humor negro, del  extinto Chumy Chúmez, sobre parejas que se llevan mal,  en el que se ve en una viñeta grafica al marido que ha asesinado a su esposa y confiesa ante el tribunal que lo juzga: “¡la maté, pero fue en legítima  defensa!”.  En las relaciones más frecuentes y normales entre maridos y esposas, cónyuges en el género común, se suelen dar de todos los casos, desde los más felices a los más tristes o rutinarios,  especialmente cuando llevan decenios de años durmiendo en la misma cama. En nuestros lares aún no se ha extendido la muy buena costumbre de las parejas de suecos y otros nórdicos, que duermen desde hace siglos  en camas separadas. Lo cual evita una serie de inconvenientes que no es necesario detallar aquí.

A lo que iba: quiero resaltar hoy, queridos lectores, los casos de tres matrimonios  ejemplares, tres,  que vivieron decenas de años juntos, que no soportaron la muerte del cónyuge y murieron poco tiempo después, tristes en la soledad sobrevenida. Veámoslos:

1.- El premio Nobel de Fisiología y Medicina en 1959 fue el asturiano doctor Severo Ochoa. Pasan los años felizmente y en mayo de 1986 falleció su esposa, Carmen García Cobián, a quien llamaban ‘el bastón de Severo’. El óbito de su cónyuge fue un golpe muy duro que sumió a don Severo en una profunda depresión hasta su propio fallecimiento, el 1 de noviembre de 1993.

2.- Hace pocos días se cumplieron veinte años de la muerte de Federico Fellini, cineasta italiano sensacional, y también extravagante, cursilón y amanerado. Había estado casado felizmente a lo largo de medio siglo casi exacto con aquella prodigiosa actriz, Giulietta Masina, tan corta de estatura como inmensa y magistral en la pantalla, en películas tales como ‘Las noches de Cabiria’.  Giuletta se fue también a los pocos meses, tras las huellas de su esposo,  por no resistir tan definitiva separación en viudedad.

3.- Este último caso es cercano a mi familia y me concierne personalmente. Lo citaré solamente por los nombres de pila. El 15 de abril de este año 2013 fue el duelo de Isabel, esposa de Antonio, matrimonio que siempre estuvo muy unido. Antonio murió pocos meses después, en agosto. Al verse sin ella en este mundo, no soportó la falta de cariño que Isabel siempre le había profesado.

Descansen en paz estas tres parejas muy bien avenidas, se lo merecen. Fueron matrimonios ejemplares.


                                                                     Espectador 

No hay comentarios:

Publicar un comentario