EL PSOE ESTÁ DESQUICIADO

Lorenzo de Ara

Hoy mujer, mañana hombre, pasado mañana las dos cosas a la vez

De “la metamorfosis” del checo a la ley trans del psoe. Y otros, claro. Pero me quedo con el psoe, el partido sin valores personales que lleva mandando sobre España desde la muerte de Franco y la irrupción de la democracia.

Ya está aquí. La tenemos recién salida del horno. Hecha una mierda pero así la quieren los amigos de los enemigos del ser humano.

El sexo biológico ha muerto y los hijos de puta de la izquierda (no todos, lo sé muy bien) aplauden con plenitud orgásmica la aprobación de la llamada ley trans. 

Si hoy te levantas mujer, bien; si te levantas hecho hombre, bien; si vas a vivir siendo las dos cosas al mismo tiempo, pues miel sobre hojuelas. El capricho es lo que predomina y cuanto más frívola sea tu ensoñación, más cerca estará la culminación del laborioso trabajo de construcción de un mundo mejor.

Porque la izquierda, con ley trans y la Ley de Libertad Sexual deja expedito el camino para un futuro inmediato donde el disparate se convierte en el alimento que alumbre horrores de convivencia.

Con estas leyes es inevitable que los animales tengan derechos, los mismos derechos que el ser humano. Y que le vayan dando a Fernando Savater si afirma lo contrario. Ya puestos a vivir en el manicomio de la desnaturalización de la democracia, las consecuencias sociales y humanas de tales leyes se aceptan como animal de compañía.

A todo esto lo llaman progreso. Una aberración más que por desgracia el gobierno del psoe entiende que es lo que quiere el pueblo español, las familias españolas, qué más dará que voten izquierda, centro o derecha.

Dar protección a una minoría que se siente metida en un zulo al que llamaremos cuerpo extraño, es obligación de una sociedad que ojalá tenga claro de una vez por todas lo que significa amar a tu prójimo como a ti mismo. El problema de esa minoría es demoledor. No podemos desatender esa realidad.

Aquí una parte editorial del periódico El Debate: “Porque desprotege a la infancia y a la pubertad, para empezar, avalando el cambio de sexo en fases de inmadurez donde, con la ciencia en la mano, no se tiene nada claro: inducir tratamientos hormonales e intervenciones quirúrgicas irremediables y de graves consecuencias para la salud física y psicológica es una agresión institucionalizada desde el propio Gobierno que alguien debe parar. Y trivializar la condición de mujer, que tanto ha tenido que luchar a lo largo de la historia para alcanzar la igualdad real, permitiendo que cualquiera pueda serlo acudiendo a un registro civil y cambiándose el nombre y el sexo legal en cinco minutos; es otro desvarío sin parangón en el mundo civilizado que altera la convivencia de manera kamikaze.”

El mismo periódico recuerda que El Consejo de Estado en un contundente informe sentenció “que conceder el cambio de sexo a menores de 18 años sin aval judicial era un abuso.” Para desgracia de la buena salud mental de todos, dicho informe no es vinculante.

Ojalá el Tribunal Constitucional tire abajo lo que el psoe levanta con el objetivo de provocar miserias personales irreversibles.

El psoe hace muchos años que apuesta por la deshumanización de la sociedad. Por ejemplo cuando machaca con el aborto como la única manera ideal que tiene de realizarse una mujer; cuando da a una menor la misma herramienta sin presencia de los padres.

Cuando se produzca un cambio de gobierno y con un próximo presidente democrático en La Moncloa, estas leyes deben ser arrasadas. Un olvido de laboratorio ideológico, un dejar pasar el tiempo hasta que los españoles olviden, una argucia legal para que todo quede más o menos como está ahora, sería la felonía absoluta de la derecha democrática.  

El viaje sin retorno del psoe hacia un mundo sin valores personales y con un horrendo desconocimiento del país donde pisa y manda, terminará con votaciones libres.

Este psoe contentadizo ante Podemos se me antoja luctuoso. Pero es lo que hay.