Bienvenidos al Diario del Valle

SEARCH

domingo, 6 de septiembre de 2020

CRISIS TURÍSTICA: LO QUE ESTÁ EN JUEGO


Salvador García Llanos

Diseñar corredores turísticos seguros con Canarias a lo largo de las próximas semanas. Este es el objetivo inmediato de turoperadores, organizaciones empresariales y administraciones públicas para tratar de reducir los efectos de la crisis. Objetivo difícil, claro que sí. Pero hay que intentarlo porque las situaciones adversas están para ser superadas. Si se quiere buscar culpables, háganlo; pero lo importante es aportar alternativas, madurarlas, defenderlas con unidad de acción y aplicarlas con esmero, una vez convenidas.

El virus sigue causando estragos en Canarias. La realidad de las cifras de los contagios en las islas ha sido determinante para que los gobiernos de los dos principales mercados emisores hayan incluido el destino en las listas de los lugares donde no se recomienda viajar. Ahora hay que ir a los temporada de invierno y para ello hay que reducir la curva de contagios hasta situarla por debajo de los cincuenta casos por cada cien mil habitantes y frenarlos para volver a presentar las credenciales de destino seguro, que se tenían pero que se perdieron hasta terminar provocando una situación inédita en el principal tejido productivo de nuestra economía.

El presidente de la Asociación Hotelera y Extrahotelera de la provincia de Santa Cruz de Tenerife (Ashotel), Jorge Marichal, ha sido contundente al señalar que “si no controlamos la tendencia de los contagios, el ímprobo esfuerzo que estamos llevando a cabo de forma coordinada con las administraciones públicas y los principales turoperadores no servirá de nada”. Marichal recuerda que la realización de test y la puesta de marcha de la aplicación (app) de trazabilidad, --la patronal viene solicitándola desde mediados de abril-, “no son soluciones únicas, pero sin duda contribuyen de forma notoria al control de la enfermedad y a lograr un destino seguro”.

Diseñar un protocolo específico con el Gobierno de Canarias con el fin de establecer, de forma pormenorizada, todos los pasos y todas las acciones que deben llevarse a cabo en aquellos casos que resultaren positivos tras la realización de los correspondientes test tras su llegada a las islas, es otro de los objetivos inmediatos. De darse esta circunstancia, según fuentes de la patronal turística tinerfeña, el protocolo incluirá la derivación a establecimientos hoteleros denominados ‘arcas de Noé’, en los que serán atendidos con todas las circunstancias y las medidas de seguridad correspondientes, haciendo uso de las disposiciones incluidas en el seguro contratado por el Gobierno autónomo para esta coyuntura.

Por otro lado, en lo que a los test se refiere, el Grupo de Estudios Turísticos ‘Calínico’, se ha dirigido al presidente del Cabildo Insular de Tenerife, Pedro Martín, distinguiendo dos situaciones:

a) Antes del embarque en origen o a la llegada al destino.

Se considera prioritario el test en origen por parte de todos aquellos turistas que viajen a través de un turoperador o viaje organizado. Su importe va incluido en el paquete turístico y el pasajero deberá embarcar una vez presente el documento oficial acreditativo de resultado negativo. De esta manera se genera una gran confianza entre los pasajeros ya que al embarcar se sabe que no hay un positivo y a la llegada al destino, pasará por los controles habituales sin necesidad de hacer test.

Aquellos turistas que lleguen al destino en un vuelo de viaje no organizado, deberán hacer lo siguiente:

Presentar un documento oficial válido que acredite el resultado negativo en el test que voluntariamente se hizo en origen, lo que le exoneraría de la obligación de hacerse test a la llegada.

En el caso de llegar a destino sin test, tendrá que hacérselo antes de cualquier otro control o servicio. En caso de dar positivo, se acogería a los beneficios de la póliza de seguro contratada por el Gobierno de Canarias.

b) Test a la llegada. Si está fuera la única opción, además de la aparente inviabilidad dada la demora que produciría a los pasajeros para llegar a su hotel, si uno de los pasajeros da positivo, habría que confinar a todos los demás (+- 200), con lo que se vendría abajo todo lo conseguido o avanzado.

El coste de estos test deberán ser financiados por el Gobierno de Canarias, el Cabildo de Tenerife, en nuestro caso, y por las empresas hoteleras beneficiarias.

Como medida de garantía habría que aplicar y mantener una muy organizada y efectiva trazabilidad que evite el contagio provocado desde el interior.

El test a la salida se considera fundamental como garantía sanitaria al país de origen. Si al hacer este test alguien da positivo, no embarca y se somete a cuarentena y curación acogiéndose a la póliza de seguro a la que anteriormente nos hemos referido.

En definitiva, iniciativas para intentar doblegar la curva de contagios, recuperar el crédito sanitario, ofrecer garantías palmarias a los clientes y afanarse en la recuperación de mercados emisores.

Iniciativa privada y administraciones públicas están condenados a entenderse. Saben lo que está en juego.

No hay comentarios:

Publicar un comentario