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miércoles, 15 de julio de 2020

AQUELLAS FIESTAS DE JULIO EN EL PUERTO DE LA CRUZ DISTINTAS Y DISTANTES (I)

Agustín Armas Hernández

El año pasado, por estas fechas, quedaron suspendidos para propicia ocasión, los articulitos que veníamos publicando en este mismo rotativo << EL DÍA>>, acerca de las fiestas de julio que se programaban en la década de los años 50 en el Puerto de la Cruz. 

Hoy, un año después de aquella interrupción volvemos a destapar de nuevo para los nostálgicos portuenses y allegados el baúl de los recuerdos. El objeto, como quedo dicho en los anteriores, no es otro sino que afloren a nuestras mentes los recuerdos y vivencias de aquellos años idos. Época que, de cualquier forma, a los que éramos mozos en aquel entonces no se nos olvidaran fácilmente, puesto que estábamos en la flor de la vida. No obstante, por la importancia que tienen y el tesoro que contienen, conviene revivan para las nuevas generaciones de portuenses y para todos aquellos que por un motivo u otro se han olvidado de aquellos acontecimientos.

Extrayendo los pétalos de la flor del tiempo, nos ha dejado, de nuevo, ver el mes de julio. Mes que para los hijos del Puerto de la Cruz significa algo muy importante y, por importante, deseado. A julio lo esperamos con impaciencia porque su arribada nos aporta la fiesta principal de nuestra querida cuidad, en honor del Gran Poder de Dios y la Santísima Virgen del Carmen.

El Puerto de la Cruz, cosmopolita y poliglota, se deshace en atenciones con cuantos les visitan en este tiempo de máxima solemnidad y alegre algarabía popular.

Compartir quiere, con todos, el fiestero y veraniego mes de julio, en el que el pueblo se expande en sano regocijo.

Por ser pionero centro turístico de Canarias, por su belleza y benigno clima, etc., el Puerto de la Cruz es conocido en todo el orbe.


De ahí que acoja en sus entrañas, todo el año, a miles de turistas que aquí llegan con intensión de descansar y disiparse de los avatares opresores de la lucha cotidiana. Concluido quedó con el último artículo publicado lo más sobresaliente de lo acontecido en el año 1953 en la hoy cuidad turística. Por lo tanto, entremos en éste a relatarle lo más destacable del año 1954. Para ello nos valemos, como en años anteriores, del programa de las fiestas ese año imprimido; pues aunque uno no quiera siempre se le olvida algún acto de los programados.

El año 1954 fue prodigo en eventos para el puerto de la cruz, tanto en fiestas como fuera de ellas. Uno de los mas relevantes ocurrió el 19 de mayo de dicho año, al ser bendecida la nueva imagen de la Santísima Virgen del Carmen, Patrona de los pescadores ranilleros. Larga y paciente fue la espera, pero, al fin llego la excelsa y reluciente madre de los marinos. El artista portuense que talló la imagen supo, a la perfección, captar el gusto de los pescadores, sus vecinos, en cuanto a la Virgen se refiere, o sea: guapa, morena, con aires de pescadora, más, con mirada profunda y bondadosa. Pero… veamos lo que dejo escrito al respecto en el programa de las fiestas de 1954, don Diego Palenzuela Pérez que, junto a otros tres doctores de las letras, realzan y enriquecen dicho programa. Helo a continuación extractado:<<En los anales históricos-religioso del Puerto de la Cruz, el 19 de mayo de 1954 tendrá mención preferente, por ser fecha en que se logro hacer realidad efectiva y culminación feliz vehemente anhelo local, de poder orar en el culto religioso a una nueva imagen de Nuestra Señora del Carmen. Un deseo satisfecho por el amor que por su pueblo natal demostró un joven escultor y un gran portuense: Ángel Acosta Martín. En ese día inolvidable, de los ojos del artista brotaron lagrimas de emoción ante el espectáculo indescriptible del fervor de un pueblo estacionado en el muelle y que alzo en hombros y le elevo junto a la imagen bellísima, fruto de su inspiración, que como caudal sublime hizo posible plasmar en esa talla maravillosa que ofrendo desinteresadamente, con el más delicado gesto que honra y enaltece a este hijo de nuestro pueblo que , por haberse ausentado nuevamente, no le será posible captar en nuestras fiestas, lo que podemos considerar una ratificación de aquellas jornadas memorables, que una vez mas hará vibrar nuestras fibras emocionales, el día que su Virgen del Carmen reciba el beso de las aguas en su primera procesión sobre las olas del mar Atlántico>>. D Diego Palenzuela querido y respetado ciudadano portuense, termina su magnífico escritos con estas emocionantes palabras: << ¡Fiestas del Poder de Dios y del Carmen! ¡Fiestas del Puerto! Máxima expresión de sentimiento y alegría de este pueblo acogedor, alegre y laborioso, que lleva en sus entrañas un caudal impoluto de cualidades espiritualmente invalorables, que ayer hoy y mañana fue, es y será vivo ejemplo de inalterable civismo>>.


Como he dado a entender anteriormente otros estupendos escritores completan el programa que nos ocupa. Mas como se harían muy largos en este espacio limitado, por el interés que tiene lo haremos en sucesivos escritos, de momento vemos otros sucesos y curiosidades acaecidos en el Puerto de la Cruz en los años citados.

Actividades del Instituto de Estudios Hispánicos de Canarias Durante el mes de junio pronunciaron conferencias en el cultural instituto las siguientes personalidades: Dr. Don Juan Álvarez Delgado director del Instituto de Enseñanza Media de Santa Cruz de Tenerife y catedrático de Lengua Latina de la Universidad de La Laguna y el profesor de Historia del Arte de la misma universidad Dr. José María Balcells y Pinto. La primera versó sobre: <<Sociedad y Cultura de los aborígenes>>. Y la segunda, acerca de la <<Pintura Moderna>>, la que fue contemplada con un centenar de proyecciones.

Del 28 de mayo al 11 de junio expusieron, en el mencionado Instituto, sus obras de pintura y escultura J. López <<Olaki>> y L. García Vidal.

También lo hizo con sus oleos, del 11 al 21 de junio, en el mismo salón de exposiciones el artista Francisco Concepción Pérez.


Sociedades de recreo y clubs,en el Puerto de la Cruz en la actualidad – no se sabe el porqué- adolece de una sociedad cultural-recreativa, donde los ciudadanos, como antaño, puedan reunirse a dialogar y distraerse al final de la jornada cotidiana (me estoy refiriendo a las personas mayores, aparte existir, eso sí, la llamada 3ª edad). Es cierto, que existen en la actualidad, en el Puerto de la Cruz varias asociaciones de vecinos, mas eso es pan para hoy y hambre para mañana. Pues según lo oído, lo que más se practica en ellas es el juego del domino y del parchís, pero… veamos las sociedades de recreo que palpitaban en el Puerto de la Cruz según folleto en ese tiempo editado: aparte, también, mencionare los clubes que, por cierto, casi todos por no decir todos, han desaparecido.

En la otrora alegre y bulliciosa Plaza del Charco estaba ubicada la entrañable y siempre recordada sociedad de Iriarte. ¿Qué portuense no la recuerda? ¿Quién no bailo, alguna vez, en sus salones y terrazas, al ritmo melodioso de las orquesta Manigua o Casablanca? (Esta última de los Realejos). Esta institución cultural y de recreo, por motivos que no vienen al caso, serró sus puertas en el año 1957. ¡Cuántos buenos y gratos recuerdos!

En su magnífica y bien surtida biblioteca se formaron, intelectualmente, infinidad de jóvenes y no tan jóvenes que acudían a ella a consultar sus libros o simplemente a leer sus revistas y periódicos que diariamente llegaban a la misma.

Conciertos musicales, exposiciones de pintura, juegos, deportes, eran otras de las actividades que se programan en la Sociedad Iriarte que tanto echamos de menos.


En la calle que lleva el nombre de los famosos Iriarte, esquina a la calle Blanco, estuvo instalado el Casino <<Puerto de la Cruz>>, conocido popularmente con el nombre de <<Casino de los Caballeros>>. Dicho Casino, como la Sociedad Iriarte, poseía una estupenda y bien equipada biblioteca, y en cuanto a sus actividades eran parecidas a las de la sociedad antes citada, pero sin tanto holgorio entusiasta y juvenil.

En el Parque de Taoro se encontraba, y se encuentra, puesto que aun existe, la famosa Biblioteca inglesa, que abierta en 1903 posee más de 50.000 volúmenes. En su entorno se encuentra también el colegio que lleva el mismo nombre.


En los aledaños del populoso y prestigioso barrio de San Antonio se encontraba instalado el famoso club inglés. Este poseía un bonito y cuidado césped. Dicho club fue fundado en 1.902 y en sus instalaciones se podía, entre otros, practicar los siguientes deportes: tenis, croquets, etc. Este famoso y veterano club serró, sus puertas, el 13 de Abril del año 2003, debido a que los propietarios del terreno donde estaban ubicadas sus instalaciones lo reclamaban por motivos de herencia. Aparte, también, debido a que sus viejos y veteranos patriarcas, fundadores del mismo, dejaron de existir. No obstante otros descendientes podían tomar el relevo.

(Continuará)

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