Salvador García Llanos
Nace con vocación de turoperador la compañía aérea que pone
en marcha la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palmas, La
Gomera y El Hierro (Ashotel). Una sociedad limitada, con capital de varios
empresarios hoteleros de las islas, tras la aprobación de la asamblea de la
organización, está ya constituida para ir materializando un proyecto del que
siempre se habló, pero en el que poco se avanzó.
Ahora se dan los primeros pasos, en unos momentos aún de
incertidumbre para remontar la pandemia. Suponemos que hay criterios para haber
valorado la oportunidad e impulsado la decisión mientras aún se debate la
reanudación de la actividad en el ámbito alojativo, se negocia la extensión de
los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y se plantea desde el
lado empresarial una renuncia al apartado de haberes consignado en el convenio
colectivo del sector.
Insistimos: habrá razones para poner en marcha la
aerolínea, justo cuando también el sector del transporte aéreo trata de superar
los efectos de la pandemia y las grandes compañías claman por ayudas estatales
para seguir operando y subsistir. Pero habrán de ser convincentes. Máxime
cuando entre las informaciones que circulan tras la constitución de la sociedad
limitada de la patronal hotelera figura la relativa a que, en principio, la
compañía solo dispondrá de un aparato que, a la espera de más detalles,
cubriría la ruta con la península. La iniciativa cuenta con el asesoramiento
aeronáutico de la empresa ‘One Airways’, radicada en la capital tinerfeña desde
2009 y de capital cien por cien canario, en tanto que también confían los
empresarios en encontrar apoyo de varias administraciones públicas canarias, o
sea, las mismas que ahora están reorientando presupuestos para fijar objetivos
prioritarios en el gasto social.
Bueno, son respetables las iniciativas de negocio
promovidas con capital privado –en este caso, queda abierto a otras
participaciones- y se trata ahora de comprobar si los fundamentos para hacerla
viable son sólidos. Las dudas de la oportunidad son lógicas a tenor de las
circunstancias que concurren. Ashotel se embarca en un proyecto que requiere no
solo un buen asesoramiento técnico, sino que exigirá dedicación, presteza y
también perseverancia.
La patronal tiene la palabra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario