José
Peraza Hernández
Hoy
día, se le pone más importancia a una cosa u a otra. Hay momentos que se le
pone importancia a cosas insignificante, que a las que realmente las tienen. Y,
es más, las tenemos delante de nuestros propios ojos, y todos no la vemos, o no
se quiere ver.
Concretamente
el 24 del mes pasado, estuve por la ciudad turística de Puerto de La Cruz. Y
concretamente me senté en la terraza de la cafetería que se encuentra en la
plaza de la Iglesia de Nuestra Señora La Peña de Francia. Donde tengo qué,
tiene sus jardines, y la calle Quintana, muy bonita. Cosas que hay que decirlo
también. Momentos seguidos, hace acto de presencia una ambulancia, la que hace
parada en la esquina de la calle Santo Domingo, donde se iban acercando
movimiento de personas junto a la ambulancia. Visto esto me acerque al jugar, y
se encontraba en el suelo un Sr. sangrando, por la nariz, y la frente, la
verdad, con todo mi respecto, tenías lo que decimos (…), vamos a decir mala
imagen, queda mejor. Barba, pelo largo, fue una cosa espantosa, era de
nacionalidad suizo, se pudo observar que en una de las bolsas tenía un cartón
de vino. Tanto hicieron los enfermeros que lo convencieron para introducirlo en
la camilla de la ambulancia. (Me dijeron, que era trasladado a la Clínica San
Fernando.
Allí
se encontraba unas señoras qué, me contaron esto es un día si otro también. –
Me dicen, Ud. No ha visto esos que se encuentra en la plaza, son amigos de
este, eso no se pueden consentir. Todos los días borrachos, fumando de todo
(…), hasta se orina en la misma plaza. Eso es una vergüenza, la gente tiene
miedo de pasar por allí, porque ellos mismo se insultan a gritos. Por favor,
que dios lo vea, delante de la puerta de la misma iglesia, donde se ponen a
pedirles dinero y cigarrillos a los turistas. Y no hay quien haga nada. – visto
esto, la ambulancia se fue, y yo me fui a la terraza a seguir tomando el
contado, hasta frío estaba, donde pedí otro.
Pues
desde allí puede comprobar la veracidad de lo sucedido. También había dos
mujeres con ellos. Podría seguir hablando. Pero con esto ya se pueden imaginar
con esta la plaza de la Iglesia. Esto no se puede permitir de ninguna forma.
“Una imagen para nuestro turismo fatal, como para las personas que pasan por
ella.”
Pues
pasado unos días, me llevé una gran sorpresa, porque me encontré en las redes
sociales, personas indignadas, por la situación que se encuentra en el lugar.
Le sacaron foto a una persona del grupo, tumbada en un bando de la misma plaza,
donde se podía verle el calzoncillo. Otra persona, sacar otra imagen a otro,
haciendo pipi, para que quede más fino, en la misma plaza. Para más colmo, se
encuentra el Colegio en ese mismo lugar, de niños y niñas. Por favor, tomen las
medidas oportunas, pero “urgentisimo”. Quiero decir que esto no es buscar las
cuatro patas al gato. Esto buscar una solución lo antes posible. Que baje dios
y lo vea.
A
reflexionar
No hay comentarios:
Publicar un comentario