JUECES

Lorenzo Soriano

Dos gentiles conversos, versados en el Tanaj, discurren acerca del Libro de los Jueces .

                          

Presentan a los Jueces o Libertadores que salvaron al pueblo de la esclavización. Estos después de liberarlos, los gobernaron un tiempo.

Es el momento de la Tangentopolis a la española. Es el momento de que los De Pietro españoles, se unan a un movimiento cívico ciudadano al estilo de “maní puliste”, y con la ayuda de empresarios, comerciantes, profesionales y ciudadanos hartos de soportar la “mordida” política, de los “convolutos” mafiosos, que hacen imposible la vida de este país, demos la vuelta al modelo e instauremos un sistema que nos blindé ante ellos no al contrario. Los Jueces Castro y Alaya, están muy solos. Los fiscales que normalmente imputan, aquí, extrañamente protegen a los presuntos delincuentes, están pidiendo sobreseimientos sospechosos, y las presiones "del Rey abajo son brutales", para que siga esta fiesta. 

Los Jueces aplican Leyes sospechosas sin protestarlas, los tribunales que acogen "delitos" fiscales condenan aplicando Leyes cuestionables en materia de defensa del "confiscado", que ni sabe, ni entiende ni son delincuentes más que en un pequeñísimo número, porque los grandes ya se las arreglan para que no les alcance. Solo los jueces podrían sacarnos de este profundo y tenebroso hoyo, renovando las instituciones, protegiendo al ciudadano, encausando a los "trileros" y encarcelando a los responsables de estos desmanes. Si no lo hacen esto terminara muy mal, ya que puede empeorar sin duda y mucho más, la situación que padecemos.   

Soy muy pesimista. En España el Montoro de turno, normalmente el vicepresidente del poder ejecutivo, maneja el dinero de los impuestos y atracos varios. Con él, y con las listas, amordaza al legislativo, y entre ambos dos juntos y a la vez como decía el lugareño, aterrorizan y secuestran al Judicial. Este, por Corporativismo absurdo y rastrero prefiere no meterse con el centenar de compinchados con el gobierno, aunque ellos, miles, no estén de acuerdo y jamás les llegue prebenda alguna, en cualquier caso. Luis Bertelli, en su obra “Clan Judicial” y “Jueces a Juicio”, ha sabido mucho de ello, lo ha sufrido y padecido hasta límites insospechados.

Creo que los Jueces unidos podrían salvarnos de esta Harca depredadora que es la clase política. Pero no lo harán.  En España se vive pensando en que volveremos a como estábamos, que, aunque ahora retrospectivamente vemos que era una gloria, hasta nos quejábamos bastante. En España presumíamos de que, sin estudios, sin grandes esfuerzos, con poca dedicación y mucha vacación, teníamos casa, coche, seguro médico ilimitado, de desempleo y pensión asegurada. Por lo que lógicamente queremos volver a eso que se nos prometía desde Aznar a Zapatero, reconociendo que este último ha sido la Peste Negra de este periodo de la historia española, por incompetente y por falso. Y la política al uso que se niega a desmantelarse, nos insiste en que podemos volver a “crecer”, a “financiar” y a “gastar”. Ellos tienen poca vergüenza y alegan que… ¿Qué van a decir si no?, ¿Qué nos cortemos las venas, además a lo largo que a lo ancho tarda mucho y es más doloroso?

El TC luso acaba de darnos una lección, creo que, a mucha Europa, pero sobre todo a su vecino Ibérico; desmantelen el gasto público para que fluya el gasto social y el escaso dinero no lo acapare el gobierno para sí solamente. El Presidente llegado tendrá que hacerlo a regañadientes y dando un mal ejemplo a lo que pretende el gobierno español que es todo lo contrario. Mantenerse ellos hasta que esto caiga definitivamente, ya que no les quepa duda que caerá, como la breva madura.

Si los Jueces quisieran, ¡ay dolor!, habría esperanza, pero…… no querrán.   

 

A reflexionar.