Bienvenidos al Diario del Valle

SEARCH

lunes, 13 de junio de 2016

UN DEBATE Y NUESTRO DONALD TRUMP, NUESTRA HILLARY CLINTON Y NUESTRA EVA BRAUN

Lorenzo de Ara 

Lamentar que se celebre un único debate entre los cuatro grandes líderes políticos de nuestro país. Tanto denunciar el populismo, la trivialización, el postureo, pero la verdad es que los cuatro partidos no se ponen de acuerdo en mantener más debates y, así, de paso, terminar con las apariciones en calles, plazas y cualquier rincón de España, anunciado frases oportunistas y potenciando el guerracivilismo. Los españoles necesitamos conocer qué propuestas llevan en sus respectivos programas para terminar con el paro, para hacerle frente a la precariedad laboral, para poner fin a la desigualdad social, la corrupción y un largo etcétera de calamidades que nos agobian desde la superficialidad de la piel hasta lo más hondo de nuestro ser. Con un solo debate no se conseguirá el objetivo. Se consumirá el tiempo entre insultos, eslóganes simplistas y reiteradas promesas que terminan siempre en el cubo de la basura, este caso el citado cubo no es más que la urna del colegio electoral.  La partitocracia no cede un milímetro. Un debate es una golosina para contentar al niño. Entretenimiento basura con la ausencia imperdonable de Javier Vázquez. …………………………………………………………….
El todo vale con tal de lo que sea. Sinceramente pienso que Podemos ya no quiere el poder como tal. El poder es un juguete con el que quieren entretenerse un rato. Me explico. Los niños están jugando. Emplean armas de fuego de verdad, eso es verdad, pero para ellos todo es un juego. Que se cargan la democracia, "¡pero estábamos jugando!"; que se cargan la convivencia, "¡pero estábamos jugando!"; que se matan entre ellos, "¡pero estábamos jugando!" En una floja entrevista que firma Rubén Amón en El País, Pablo Iglesias afirma: "Que yo sea prescindible es la mejor noticia para Podemos." Y cuando llegue el día dirán desde cualquier televisión, "¡pero estábamos jugando!" Y los españoles sin enterarse. Y a otra cosa.

Pablo Iglesias es nuestro Donald Trump. Y nuestra Hillary Clinton,  a lo mejor, Bescansa, aunque Colau y Carmena hacen un esfuerzo muy encomiable por parecerse a Eva Braun bailando armoniosamente en el refugio de la bestia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario