Antonio-Pedro Tejera Reyes
Domingo 22 de noviembre 2020. EL ARCHIVO de hoy de nuestro
amigo Alejandro José Gallard, nos trae a la mente el revulsivo de la situación
anímica en que nos encontramos, recordándonos la historia y sus consecuencias,
al no saber aplicar sus enseñanzas a las acciones de los hombres, hoy de los
hombres y mujeres.
No es una acción premeditada, ni nada que se le
parezca, en un reflejo del mal que La
Humanidad está viviendo y que a nosotros por muchas circunstancias que nos
rodean, nos tiene paralizados en nuestras aspiraciones y deseos de servir. Como
decimos los rotarios: “servir es mi ocupación”
Y es que el panorama que tenemos delante nos entristece, No
es para menos. “Nos deja sin palabras porque nuestra indignación lo supera
todo”
Estamos en una situación donde se nos abren todas las
ventanas para dejarnos ver un mundo donde triunfa la sinrazón. La falacia sin
causa. Rodeados de personajes a quienes solo les importa sus habilidades
políticas despreciando todo lo que
pudiese ser un privilegio para impulsar el desarrollo de una sociedad justa,
perfecta, cualificada, donde no exista la pobreza, ni económica ni cultural. En
definitiva, el mundo soñado como “el paraíso terrenal”.
Se opone a esta idílica visión esa contumaz prepotencia del
que todo lo quiere para sí mismo sin importarle nada los medios que emplee para ello. El poder
llámense político o económico, es su meta. Su triunfo, su delirio, su
irrenunciable deseo…
Se desprecia como desperdicio todo lo que sea prosperidad
compartida, No interesa, Solo es válido lo que le sirva para sus malvados
propósitos.
Proyectos empresas, hechos y realidades contrastadas no
sirven para nada ante esas actitudes de los que gobiernan de una u otra manera,
No importa que sea mediante un voto democrático o una dictadura alcanzada hasta
con las armas… Aquí no vale nada ante esa actitud de los gobernantes. No
interesa la prosperidad del pueblo. “Hay que mantenerlo en la ignorancia para
vivir de sus carencias“.
Estamos indefensos ante esta deplorable situación a que ha
llegado el mundo de la sinrazón. No interesa educar, no interesa otra cosa que
no sea el poder…
El mundo no podrá avanzar sin una adecuada enseñanza. Lo
dice el Papa Francisco “El mundo no cambiará si no cambia la educación”
Ahora nos miramos al espejo y vemos una cara de
desconsuelo. Es la cara de la tristeza que nos invade y que vemos en nuestro alrededor cuando tenemos
al frente a personas “fracasadas” en sus intentos de cambiar todo este
panorama, la inmensa mayoría de las veces, después de largos años de trabajo,
sin ningún otro reconocimiento que algunas “migajas” para que se estén callados
y no entorpezcan la labor de quienes solo piensan en mismos y sus labores de
“gobierno”.
Es una realidad incuestionable. Las más ambiciosos
proyectos para hacer prosperar países donde lo tienen todo: la cultura, los
medios naturales, históricos, humanos, etc., para colocarse en la realidad de
un mundo mejor, se estrellan ante las manipulaciones políticas a las que no les
interesa otra cosa que los sillones del poder, De mantener su status, sin
importarles para nada pasar a la historia junto a Stalin, Hitler o Mussolini,
como bien dice Alejandro José. Es lo que hay No nos lo contaron. Lo estamos
viviendo, en vivo y directo…
Decía, el ilustre político canario Juan Manuel García Ramos
que “Solo los seres humanos somos culpables de los que nos sucede”...
Una realidad sin
ningún tipo de discusión
Nos queda solo la esperanza y el deseo de que un día
alguien llegue al poder sobrenatural – sí, sobrenatural – y acabe con este
egoísmo impenitente que lo trastorna
todo. Lo deja con sus miserias al aire y sin otra esperanza para los que
trabajamos por un mundo mejor, que refugiarnos en las retóricos principios que
predica Rotary Internacional: “el aprecio a toda ocupación útil y la dignificación
de la propia… la inteligencia, la buena voluntad… la buena fe como norma en
nuestras actuaciones… la aplicación del ideal de servicio.
Es el mundo de la sinrazón el mundo en el que vivimos, en
el que nos estrellamos todos los días, ahora en Venezuela – el país que fue al más
rico de América – hoy sin agua, sin luz, sin teléfono, sin gas…. sin gasolina.
La Humanidad, no es la que se descompone, es que está
descompuesta, es pues innegable lo que
aquí exponemos.
Insistimos, todo lo que sea prosperidad compartida, mejora
de la calidad de vida, camino hacia el bienestar social de todos, es algo
inadmisible para quienes nos gobiernan, aunque sea lo que todos los días, por
la mañana y por la noche, lo pregonen con un cinismo rayando la delincuencia.
A los hechos nos remitimos.
El mundo de la sinrazón. El mundo de la tristeza y el
desencanto. Es lo que tenemos,
La esperanza nos mantiene.
*Del Grupo de Expertos de la Organización Mundial de
Turismo.
*Pluma de Oro de Rotary Internacional. Puerto de la Cruz,
Tenerife, Islas Canarias.
*Diplome D´Honneur. Unión des Escrivans et Journalistes
Hellenes du Tourisme. FIJET.
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