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viernes, 17 de enero de 2020

HIPÓTESIS SOBRE LOS ATENTADOS CONTRA EL PATRIMONIO HISTÓRICO-ARTÍSTICO:


Jerónimo David Álvarez García

Este trabajo publicado en La Prensa, suplemento del periódico EL DÍA el sábado 22 de enero de 2011, prosigue el ciclo de estudios referentes a la historia contemporánea de Los Realejos. El texto, que no ha sido actualizado, es el original que se remitió en su momento al suplemento indicado.

DE LA ESPADAÑA A LA TORRE DE LA IGLESIA DE NTRA. SRA. DE LA CONCEPCIÓN LOS REALEJO

En el primer núcleo urbano del Realejo Bajo destacaban La Hacienda de los Príncipes y la primitiva ermita de Santa Ana; esta fue erigida en Parroquia de Nuestra Señora de la Concepción en 1533, escindiéndose de la de Santiago Apóstol del Realejo Alto. Su construcción siguió los cánones de las fábricas religiosas canarias tras la Conquista. Al principio se levantó una capilla provisional con paredes de piedra y barro y una techumbre de cañas. La primera ampliación dará lugar a una capilla de muros de cantería y techos de madera (mediados del siglo XVI) y la última edificación del siglo XVII a las tres naves, capillas anexas y espadaña o templete para las campanas, estructura que se mantuvo casi íntegra hasta el pavoroso incendio del 5 de noviembre de 1978 [1].
         
El cambio de los siglos XIX-XX trajo la destrucción del “gracioso templete de cubierta piramidal”[2]  y la posterior erección de la torre en la fachada. La pérdida irreparable de la espadaña estaba perpetrada, he aquí nuestro tema de estudio y debate.
         
En 1993 la torre fue derribada y reedificada pues, “ante el problema que representaba, se creyó conveniente demolerla y reproducirla en el costado sur del templo” [3].
         
Dudamos de la autenticidad de la fecha de algunas postales fotográficas de la época, pues en varias con fecha de 1890 y 1893 aún aparecía este templete (en otras de fecha análoga se observa ya la torre) [4]. Si podemos afirmar, en cambio, que en una fotografía de la Peregrinación de Nuestra Señora del Carmen al Realejo Bajo en 1904, se aprecia el primer cuerpo de la torre [5]. No obstante, verificamos dos artículos periodísticos de la época en los que se lee; “Recientemente se ha recibido por conducto de la respetable casa del Sr. D. Guillermo Büchle un reloj para la torre de la iglesia del Realejo bajo, el cual había sido costeado por suscripción entre los vecinos de aquel pueblo y de otras personas que, sin ser vecinos, también se han interesado en la realización de esta útil mejora”. [6] Unos meses después en otro diario tinerfeño se reseña la siguiente noticia; “A 658,82 pesetas asciende la cantidad recaudada por suscripción voluntaria para la colocación de un reloj en la torre de la Iglesia parroquial del Realejo Bajo” [7].
   
      
Tras la lectura de las dos notas de prensa anteriores nos surgen tres posibles hipótesis sobre lo ocurrido. Primera; pudo organizarse la suscripción popular y compra del reloj a priori, cuando hubo indicios de que se planeaba construir la torre, y probablemente por motivos económicos se pospuso unos años. Otra de carácter semántico; si los redactores de ese siglo entendían por torre lo que nosotros llamamos espadaña, es decir que dicho reloj habría sido instalado en el primer tramo del templete. Y la última evidenciaría que la torre estaba ya levantada en 1890 y se encargó a posteriori el reloj. Carecemos de datos suficientes para decantarnos por alguna de estas opciones.

No se observa en los Libros de Fábrica de la Parroquia, inscripción alguna sobre las gastos ocasionados por la torre [8]. Extraño suceso, pues en estos volúmenes y otros documentos de temática semejante se detallan varias partidas de gastos sobre la construcción del Altar Mayor, los arreglos en el tejado de la iglesia y el albeo de las paredes exteriores del templo [9]. Este hecho nos lleva a sospechar que los gastos ocasionados por la construcción del campanario fueron costeados por la iniciativa privada o por el Ayuntamiento del Realejo Bajo. Los Consistorios Municipales acudieron en auxilio de las arcas parroquiales en diversas ocasiones, el de La Orotava lo hizo con las de la Parroquia de San Juan Bautista en 1924, para sufragar la reparación del “reloj público” y el enjalbegado de su torre [10]. Aportamos un dato más en el que se registra otra donación de las Corporaciones Locales a sus Parroquias. En este caso, el Ayuntamiento del Realejo de Abajo aportó 148,20 pesetas para la adquisición de una campana para la Parroquia de la Concepción [11]. Como es sabido, el Archivo Municipal sito en el ex-Convento de las Agustinas, ardió en 1952; por lo que han desaparecido los proyectos y permisos originales, si fue el Consistorio Municipal el autor de la obra que aquí analizamos. Tampoco existe placa alguna que recuerde tal edificación y las fuentes orales consultadas no señalan a ningún promotor particular. Si alguna familia acomodada del pueblo como los Machado-Jaén (que benefició de forma mayúscula a la Parroquia Matriz) [12], los Oramas o Peraza de Ayala, hubiese edificado la torre, nos atrevemos a asegurar que lo hubieran hecho constar en una placa conmemorativa o sería recordado por los mayores del lugar.
        
Tampoco existen datos en los Libros de Cuentas de la Hermandad del Santísimo de Ntra. Sra. de la Concepción ni en los de la Cofradía de Ntra. Sra. del Carmen, de partidas destinadas para la financiación de la nueva torre. [13] Únicamente podemos asegurar por fotografías de la época, que el primer tramo de la torre corresponde al pie de la espadaña. Esta estructura fue respetada, partiendo desde ella el alzado de la obra que  hoy analizamos.[14] 
         
Partiendo de otra obra de características y estilo similares, intentaremos aproximarnos a sus posibles promotores y diseñadores. Como ejemplo, la torre de la Parroquia Matriz de Nuestra Señora de la Peña de Francia del Puerto de la Cruz, que es coetánea de la realejera. En este caso, sí existe documentación suficiente para su estudio como demuestra la doctora Carmen Fraga [15]. Esta torre fue mandada edificar por el Venerable Párroco don Manuel Ildefonso Esquivel en 1898, enajenando sus bienes a su muerte para sufragar los gastos. En la lápida de mármol situada sobre la puerta de la torre se lee; “V. PAROCHUS D. D. EMMMANUEL ILDEFONSUS ESQUIVEL SUA AD HANC TURRIM EXSTRUENDAM MANDAVIT. MDCCCXCVIII” [16]. Deducimos que era costumbre en la época dejar constancia de tales obras (no ocurrió en el caso que ocupa nuestro estudio).

       
El constructor fue don Nicolás Álvarez Olivera y el arquitecto don Manuel de Cámara y Cruz (1848-1921). Desearíamos relacionar a dicho arquitecto con la edificación del campanario de Ntra. Sra. de la Concepción, pero en las obras consultadas no se refiere tal circunstancia [17]. Otro arquitecto asociado con el proyecto de la nueva torre realejera es don Manuel de Oraá y Arcocha (1822-1889) citado por don Pedro Tarquis[18]. Probablemente las obras de la torre comenzaron después del fallecimiento de este personaje. Tampoco la profesora Carmen Fraga hace referencia a tal encargo en su biografía sobre dicho arquitecto [19]. Al igual que el profesor Gerardo Fuentes en su Diccionario Biográfico [20]. Nuestras dudas sobre dicha autoría se multiplican al leer el siguiente  párrafo: “(...) a lo largo de toda su obra Oraá y Arcocha tiene pocos proyectos de índole religioso en Tenerife, no obstante se le menciona como participante en la construcción de la torre de la iglesia de Ntra. Sra. de la Concepción del Realejo Bajo (209)”  [21].
         
Don Guillermo Camacho y Pérez-Galdós sugiere la siguiente teoría, al referirse a la consolidación y alargamiento del viejo templo de la Concepción: “(...) con la novedad de que ahora tiene dos puertas principales en vez de una: la puerta principal de abajo suponía una puerta principal de arriba; tres en total para no ser menos que la vecina iglesia de Santiago” [22]. El torrejón de las campanas”, prosigue el autor “fue destruido a principios de este siglo [el siglo XX] para hacer la torre, era un gracioso templete de cubierta piramidal, muy parecido a los que tuvo la iglesia del Puerto de la Cruz, según pueden verse en los dibujos de Williams y de Álvarez Rixo, pero de mayores dimensiones (16) [23].
         
Hace veinte años, mantuvimos una interesante entrevista con don Guillermo Camacho. Dejando a un lado los temas morales y éticos en los que acabó derivando la conversación, recordamos cómo uniendo lo arriba leído formuló la siguiente sentencia: “La Concepción poseía una graciosa espadaña y el pueblo del Realejo Bajo la derribó para construir la actual torre, pues querían tener una como la de Santiago del Realejo Alto”.
         
Los dos párrafos anteriores nos remiten a la idea de la rivalidad ancestral entre los dos pueblos, que figuraba en la obra y el pensamiento del prestigioso historiador realejero.
         
Nuevamente nos interrogamos sobre los motivos que influyeron en la destrucción del patrimonio artístico de Los Realejos [24]. ¿Lo aquí expuesto, fue considerado por los realejeros de esa época como un atentado al patrimonio histórico-artístico o como un acto político de su Consistorio, apoyado por los vecinos, dentro del clima de rivalidad que existía entre los dos municipios? En el  recuerdo del investigador Camacho y Pérez-Galdós, nos decantamos por la segunda opción. Esto nos permite formular la siguiente tesis. El Ayuntamiento del Realejo de Abajo probablemente promovió y financió la construcción de la torre de la Parroquia Matriz de Nuestra Señora de la Concepción, destruyendo definitivamente la antigua espadaña, sin otro interés que pugnar con la torre de la Parroquia Matriz de Santiago Apóstol del Realejo de Arriba.

Estas letras quedan abiertas a futuras interpretaciones o investigaciones de otros apasionados de la Historia.

Agradecemos la desinteresada ayuda de cuantas personas nos han brindado información para la elaboración de este artículo, sin la cual no habría sido posible.

         BIBLIOGRAFÍA.      

         ÁLVAREZ GARCÍA, Jerónimo David. “Hipótesis sobre los atentados contra el patrimonio histórico-artístico. Del Convento de Santa Lucía al Cementerio de San Francisco. Los Realejos”, en La Prensa, EL DIA, 7 de agosto de 2010. 
         CAMACHO Y PÉREZ-GALDÓS, Guillermo. Iglesias de La Concepción y Santiago Apóstol, 1983.
         CINCUENTENARIO FUSIÓN DE LOS REALEJOS. Ayuntamiento de Los Realejos, 2005.
         FRAGA GONZÁLEZ, Carmen. “Edificación de la nueva fachada en la parroquia matriz del Puerto de la Cruz”, en Catharum nº 9. Instituto de Estudios Hispánicos de Canarias. 2008. Pags 49-59.
         FRAGA GONZÁLEZ, Carmen. El Arquitecto Manuel de Oraá y Arcocha, (1822-1889). 1999.
         FUENTES PÉREZ, Gerardo. Diccionario Biográfico de Canarias. Arte. 2008.
         GALLARDO PEÑA, María. El clasicismo romántico en Santa Cruz de Tenerife. Tesis dirigida por la Dra. Carmen Fraga González. Universidad de La Laguna. 1984.
         GUIGOU Y COSTA, Diego. El Puerto de la Cruz y los Iriarte. 1945.
         LORENZO LIMA, Juan Alejandro. El Legado del Farrobo. 2008.
         LOS REALEJOS UNA SÍNTESIS HISTÓRICA. Ayuntamiento de Los Realejos. 1996.
         SEMANA SANTA DE LOS REALEJOS. Ayuntamiento de Los Realejos. 2003.
         TARQUIS, Pedro. Diccionario de Arquitectos, alarifes y canteros que han trabajado en las Islas Canarias. Anuario de Estudios Atlánticos, nº 11,1965.

         FUENTES.

         CUENTAS DE LA COFRADÍA DE NTRA. SRA DEL CARMEN 1868-1901. Legajo 1, Fondo Asociado. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife. Parroquia de Ntra. Sra. de la Concepción del Realejo Bajo.
         CUENTAS DE LA HERMANDAD DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO 1875-1901. Legajo 4, Fondo Asociado. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife. Parroquia de Ntra. Sra. de la Concepción del Realejo Bajo.
         DIARIO DE TENERIFE (Santa Cruz de Tenerife) 01.08.1890. Pág. 2. Biblioteca de la Universidad de La Laguna.
         DOCUMENTOS POR PUEBLOS. LOS REALEJOS. Legajo nº 5. Documento nº 14. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife.
         DOCUMENTOS POR PUEBLOS. LOS REALEJOS. Legajo nº 5. Documento nº 53. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife.
         EXPEDIENTE DE LA COMISIÓN PERMANENTE DEL EXCMO. AYUNTAMIENTO DE LA OROTAVA. 13.10.1924. Archivo Municipal de La Orotava.
         LA OPINION (Santa Cruz de Tenerife) 28.12.1890. Pág. 3. Biblioteca de la Universidad de La Laguna.
         LIBRO DE CUENTAS DE FÁBRICA. 1898. Legajo nº 4, Documento nº 34. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife. Parroquia de Ntra. Sra. de la Concepción del Realejo Bajo.
         LIBRO DE CUENTAS DE FÁBRICA. 1898-1903. Legajo nº 4, Documento nº 35. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife. Parroquia de Ntra. Sra. de la Concepción del Realejo Bajo.
         LIBRO DE CUENTAS DE FÁBRICA. 1903. Legajo nº 4, Documento nº 36. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife. Parroquia de Ntra. Sra. de la Concepción del Realejo Bajo.

         Fotos

         1.- Peregrinación de Ntra. Sra. del Carmen al Realejo Bajo en 1904. Se aprecia en el centro el primer cuerpo de la torre.
         2.- Vista del Realejo Bajo a finales del siglo XIX. El cuadrado blanco indica la ubicación de la espadaña en la fachada de la iglesia. 


[1]Fuentes Pérez, Gerardo y Rodríguez González, Margarita. Arte, en Los Realejos una Síntesis Histórica.1996.
[2]Camacho y Pérez Galdós, Guillermo. Iglesias de la Concepción y Santiago Apóstol. 1983. Pag 15.
[3]Fuentes Pérez, Gerardo y Rguez González, Margarita. Arte, en Los Realejos una Síntesis Histórica. 1996.Pag 144.
[5]Véase fotografía adjunta de este artículo titulada “Peregrinación de Ntra. Sra del Carmen al Realejo Bajo en 1904”
[6]   En Diario de Tenerife (Santa Cruz de Tenerife) 01/08/1890. Pág. 2. Biblioteca de la Universidad de La Laguna.
[7]  En La Opinión (Santa Cruz de Tenerife) 28/12/1890. Pág. 3. Biblioteca de la Universidad de La Laguna.
[8]Libro de Cuentas de Fábrica de 1898, Libro de Cuentas de Fábrica de 1898-1903 y Libro de Cuentas de Fábrica de 1903. No se conservan los Libros de Cuentas de Fábrica del período 1850-1897.
[9]Relación de limosnas para obras en la iglesia, 1921-1929. Documentación por pueblos. Los Realejos. Legajo nº 5, documento 14. Parroquia de Ntra Sra Concepción. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife, Disposiciones del párroco para disminuir los gastos en la Parroquia con motivo de los arreglos del tejado, 25.04.1881. Documentación por pueblos. Los Realejos. Legajo nº 5, documento 53. Parroquia de Ntra Sra Concepción. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife y Recibo de pago a D. Jerónimo Fuentes en 1909. Legajo 4, documento 36. Libro de Cuentas de 1903. Parroquia de Ntra Sra Concepción. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife, respectivamente.
[10]Expediente de la  Comisión  Permanente Excmo. Ayuntamiento  de La Orotava. 13.10.1924. Archivo Municipal de La Orotava y Lorenzo Lima, Juan Alejandro. El Legado del Farrobo. 2008, respectivamente.
[11]Libro de Cuentas de Fábrica 1898-1903. Legajo 4. Documento 35. Parroquia de la Concepción. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife.
[12]Fuentes Pérez, Gerardo. Los Realejos y la Semana Santa. Realidad, historia y arte, en Semana Santa de Los Realejos. 2003. Pág. 27.
[13]Cuentas de la Hermandad del Santísimo Sacramento 1875-1901. Legajo 4, Fondo Asociado. Hermandad del Santísimo Sacramento. Parroquia de Ntra. Sra. de la Concepción del Realejo Bajo. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife y Cuentas de la Cofradía de Ntra. Sra del Carmen 1868-1901. Legajo 1, Fondo Asociado. Parroquia de Ntra. Sra. de la Concepción del Realejo Bajo. Archivo Histórico Diocesano de Tenerife, respectivamente.
[14]Véase fotografía adjunta de Marcos Baeza en este artículo, titulada “ Vista desde las vueltas de Tigaiga”.
[15]Fraga González, Carmen. Edificación de la Nueva fachada en la parroquia matriz del Puerto de la Cruz, en Catharum, nº 9. 2008. Pags 49-59.
[16]El Venerable Párroco Don Manuel Ildefonso Esquivel donó sus bienes para levantar esta torre. 1898.
[17]Gallardo Peña, María. El Clasicismo romántico en Santa Cruz de Tenerife. Tesis dirigida por la Dra. Carmen Fraga González. Universidad de La Laguna. 1984 y Fuentes Pérez, Gerardo. Diccionario Biográfico de Canarias. Arte. 2008.
[18]Tarquis, Pedro. Diccionario de arquitectos, alarifes y canteros que han trabajado en las Islas Canarias, en Anuario de Estudios Atlánticos. Nº 11, 1965 y Fuentes Pérez, Gerardo y Rodríguez González, Margarita en Arte, Los Realejos una Síntesis Histórica.  Ayuntamiento de Los Realejos. 1996. Pag 136.
[19]Fraga González, Carmen. El arquitecto Manuel de Oraá y Arcocha. 1822-1889. 1999.
[20]  Fuentes Pérez, Gerardo. Diccionario Biográfico de Canarias. Arte. 2008.
[21]Gallardo Peña, María. Op. Cit. Dicha investigadora nos remite bajo el nº 209 a la bibliografía de su  tesis, en la que aparece de nuevo la obra ya citada de Pedro Tarquis. Como se puede apreciar no se aporta nada nuevo sobre la autoría de la construcción de la torre.
[22]Camacho y Pérez – Galdós, Guillermo. Op. Cit Pag.11
[23]Nos remite bajo este epígrafe a Guigou Costa, Diego. El Puerto de la Cruz y los Iriarte. 1945. Pag.15.
[24]Álvarez García, Jerónimo David. Hipótesis sobre los atentados contra el patrimonio histórico-artístico. Del Convento de Santa Lucía al Cementerio de San Francisco. Los Realejos, en La Prensa, EL DIA, 7 de agosto 2010. 

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