Javier Lima Estévez. Historiador
“Siguen
recordando a aquel seminarista que permanecía con la luz de su celda encendida
casi toda la noche. Sobre su mesa de trabajo, libros de texto, cuadernos, las
galeradas de la revista “Horizontes” (cuya dirección le fue encomendada),
partituras de la Schola Cantorum, en la que destacó como eficaz ayudante del
maestro Borguñó y algún que otro soneto escrito de contrabando entre silogismos
y proposiciones teológicas…” De esa forma, Juan del Castillo León, recogería en
un emotivo artículo publicado el 19 de mayo de 2002 las palabras descritas en
su momento por el recordado periodista y escritor Alfonso García-Ramos. Unas
palabras que el escritor y abogado orotavense rescataría en atención al acto de
homenaje que el pueblo de Los Realejos realizó ese año con motivo del
descubrimiento de un busto a José Siverio Pérez. Lo cierto es que aproximarnos
a su trayectoria es situarnos ante un hombre comprometido con el sacerdocio
(conmemora este año su 65 aniversario de ordenación sacerdotal) y una persona ligada al periodismo,
recibiendo una amplia formación en Madrid con grandes maestros del periodismo,
recordando aún muchos oyentes con nostalgia su dirección y magisterio en la Voz
del Valle y, posteriormente, Radio Popular de Tenerife, sin olvidar la etapa en
medio de ambos proyectos en la Radio Popular de Güímar. Una faceta distinguida
en diversos actos y que sería reconocida nuevamente a inicios del presente año
con el premio Patricio Estévanez, otorgado por la Asociación de la Prensa de
Santa Cruz de Tenerife (APT). Sus numerosos artículos en papel también
constituyen un hecho a destacar, siendo ya desde su etapa como seminarista
colaborador y director de la revista “Horizontes”, entre cuyas páginas se
suceden bellas poesías escritas por él. La combinación de su interés por la
escritura y la investigación tendría como resultado la obtención del Premio
Viera y Clavijo de Investigación 1976, con un exhaustivo trabajo sobre los
Conventos del Realejo publicado un año después. Y como parte de su biografía no
se puede obviar la música. Es otra de sus grandes pasiones que ha materializado
en la dirección de coros y arreglos musicales, siendo unánime el agradecimiento
al gran trabajo desarrollado junto a su recordado hermano Andrés, elevando
entre ambos el nombre de la histórica Sociedad Filarmónica de Los Realejos en
un contexto de numerosas adversidades. Por otra parte, su participación en la
escultura representa otra de las facetas innegables de un ser que en el arte ha
logrado plasmar la expansión de sus inquietudes.
Todos
esos méritos, unidos a la necesidad de reconocer el pueblo realejero el trabajo
incansable desarrollado por José Siverio durante décadas, tendrían como
resultado el esfuerzo conjunto por parte de diversas instituciones y personas
que, a título particular, no dudarían en firmar la petición para la creación de
un busto que perpetuara el recuerdo al Hijo Predilecto del municipio de Los
Realejos. Y el acto transcurrió el 17 de mayo de 2002. Hasta la plaza
parroquial de la Iglesia de Nuestra Señora de la Concepción se trasladaría un
numeroso público, compuesto por sacerdotes, políticos, amigos, seguidores y
admiradores de tal trayectoria. Tras la emotiva función religiosa, a cargo de
Julián de Armas, se procedió al descubrimiento del busto en bronce realizado
por el destacado escultor y profesor de Bellas Artes, Eladio de la Cruz
González, con una trayectoria marcada por numerosos reconocimientos en el
ámbito artístico. Toda una serie de detalles sobre el desarrollo del acto
serían descritos con gran detalle por el periodista realejero Esteban
Domínguez, en un artículo bajo el título “El canónigo don José Siverio celebró
sus Bodas de Oro sacerdotales en la parroquia de la Concepción de Los
Realejos”.
En
definitiva, quince años de un busto que perpetuará en el tiempo la imagen del
sacerdote, periodista, investigador, docente, músico y escultor que siempre ha
trabajado por los demás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario