Lorenzo de Ara
“El periodismo es necesario; pero solo podrá ser necesario
si es útil. Y no útil a la política, para pillar jirones del presupuesto, sino
a la ciudadanía, ese viejo concepto de la cultura democrática que es algo más
que métricas de usuarios y clics”, afirma Teodoro León Gross en El País.
Amén.
Alguna nota informativa atropelladamente escrita
(elaborada/parida) es verdaderamente un genocidio cultural.
Al leer el comunicado del gobierno progre del Puerto de la
Cruz llego a la conclusión de que durante más o menos 13 días con sus noches
incluidas, los chicos y chicas del poder local han estado levitando,
frivolizando en muchos rincones del ayuntamiento y mostrando una capacidad
intelectual endeble, sí, endeble, dado que no se explica que en la totalidad de
los consistorios de nuestro norte los deberes se hicieran con normalidad
académica y, aquí, dando la nota, pasaran las horas y, sobre todo los segundos,
con dimes y diretes, pero sobre todo con un silencio que ha tirado por tierra
las normas elementales de la buena conducta en este cogobierno que la
conjunción astral nos ha regalado.
Ya no habrá en el Puerto de la Cruz desmovilización de la
izquierda. Que pierda toda esperanza el PP de volver a recuperar el poder
durante varios mandatos. ¡Que se jodan los que torpemente han negado que la
gestión no tenía por qué estar reñida con una comunicación eficaz, moderna,
asesora incisiva y no convertida en fea fregona de suelos por donde pisaba el
señorito o la señorita!
Pero sigamos con el gobierno de Marco González.
Fatua es la nota de prensa donde se nos informa del reparto
de las áreas. No veo en ella un atisbo de pensamiento estratégico. Lo que sí
observo es un grito desaforado por mostrar que el cambio ha llegado, aunque
ignoran (ellos, los que mandan) que ciertos cambios son un puro gatopardismo, o
sea, mucho blablablá y cabezas en órbita, producto de la borrachera tras el
pacto de las flores portuense.
Pocos saben que el rabo de gato comenzó su invasión de
nuestra tierra en el Puerto de la Cruz, allá por la década de los 40 del pasado
siglo. De planta decorativa, a invasora depredadora que se apodera de todos y
cada uno de los intersticios.
Hay pactos en política que invaden, nunca manu militari,
pero sí con obtusa elegancia.
Me alegro de que Davíd Hernández ejerza de portavoz del gobierno en el Puerto de la Cruz, e igual interés experimento ante la confirmación de que Carolina Rodríguez -estaba cantado- se convierta en la persona de máxima confianza del todopoderoso alcalde
David, además de la portavocía, asumirá una responsabilidad
mayestática a lo largo de estos próximos cuatro años.
Espero y deseo que no busque que el individuo se convierta
en esclavo, dejando en libertad al pueblo.
La nota de prensa es aburrida, redactada para ser leída en
un programucho de la Televisión Canaria.
Lo único salvable en ella es, como resulta lógico imaginar,
el desglose de las concejalías y los nombres y apellidos de sus ocupantes.
Punto. Ni siquiera voy a entrar en esos cambios de nomenclatura que
provocan gran indiferencia en el arriba
firmante.
Este nuevo gobierno que gatea debe emplear el buen sentido
ante las circunstancias.
El tembleque, notable en casi todos ellos, debe desaparecer
cuanto antes. En ese sentido, deberían aprender de las crías de Ñus, que apenas
pasados los 20 minutos de ser paridas, ya corren, saltan, se creen invencibles,
y hasta se alejan de sus madres. ¡Osadas!
Juan Manuel de Prada asevera que “existen dos formas de
periodismo degradado. La más inofensiva se corresponde con lo que podríamos
denominar periodismo sensacionalista o amarillista, que convierte el natural
sentimiento de curiosidad o indignación del pueblo en un revoltijo de pasiones
ciegas y suspicacias de manicomio. Pero mucho más dañino que este periodismo
amarillista es el periodismo sistémico y acomodaticio, que ofrece al pueblo una
alfalfa de medias verdades falsamente tranquilizadoras (a veces regadas de
proclamas hipócritas de purismo deontológico) que anestesian su natural
indignación o curiosidad y lo conducen hasta el redil ideológico que conviene a
quienes cortar el bacalao”.
El anterior gobierno nunca halló en este periodista cosa
tal. El nuevo cogobierno asambleario portuense recibirá el mismo tratamiento.
Ya lo recibe.
P.D. Alberto Castilla estará al lado de Marco González en
Cultura. Además llevará Prensa y Bienestar Animal, entre otras áreas,
naturalmente. Enhorabuena a él y a todos los mandamases de nuestra ciudad, a
quienes deseo (no me cansaré de repetirlo) lo mejor en el quehacer de sus
agobiantes funciones. El ideal quijotesco de PSoe-ACP es gel de baño. “Platero
es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón,
que no lleva huesos. Sólo los espejos de azabache de sus ojos son duros cual
dos escarabajos de cristal negro”, J.R.J.
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