Javier Lima Estévez.
Graduado en Historia por la ULL
En el marco de las Fiestas de Invierno, surgió la idea de
crear un rallye de automóviles antiguos en el Valle de La Orotava. Una
propuesta que, desde su primera edición, congregó a un gran número de personas.
La revista de información turística Costa Canaria (disponible en la red a
través del portal Jable de la ULPGC) publicó en su edición del 30 de marzo de
1974, un pequeño e interesante reportaje analizando diversas cuestiones
relacionadas con tal experiencia en sus primeras ediciones. En su organización,
participó la firma Hernández Hernández S.L., y el Club de Automóviles Antiguos
de Tenerife, bajo el patrocinio del Ayuntamiento del Puerto de la Cruz y la
colaboración de los Ayuntamientos de La Orotava y Los Realejos. Desde aquel
momento, el evento congregó a un gran número de vehículos, destacando el
mencionado reportaje la presencia de diversos automóviles cuyo origen se
remontaba con anterioridad a los años 40, atendiendo a las disposiciones
establecidas en las bases de la propia organización, siendo un requisito indispensable
acudir con vestimentas propias de la época de los vehículos. El artículo,
adjunta una interesante fotografía en la que se muestra la participación de don
Ismael Hernández al volante de un valioso y hermoso modelo francés Amilcar. El
origen del Rallye del Valle de La Orotava se remontaba a la primera salida
realizada por la firma Hernández Hermanos S.L., a través del paseo de sus
automóviles a lo largo de diversas calles del casco portuense. Una idea que
motivó y fue germen de la acción emprendida por don Ismael Hernández, con la
finalidad de ofrecer un acto de mayor relieve e importancia en el marco de las
Fiestas de Invierno. En el artículo objeto de nuestro análisis, se destaca la
presencia multitudinaria a lo largo de diversos puntos estratégicos del
recorrido para disfrutar y “presenciar el paso de los automóviles que, en
caravana, se pusieron en marcha desde la Avenida del Generalísimo, en el Puerto
de la Cruz para cumplir el trayecto programado hasta La Orotava y Los Realejos,
por La Perdoma y La Cruz Santa, con recorrido final por las principales calles
para regresar al Hotel Puerto Playa donde se celebró un almuerzo y se hizo
entrega de los trofeos”. D. Ismael Hernández, obtuvo un rotundo éxito con la
idea y planificación del rallye, creando una estela que seguimos disfrutando en
la actualidad cada año.
No cabe duda de que el Rallye del Valle de La Orotava
representa un encuentro de obligada cita para los amantes de joyas
automovilísticas de valor incalculable. Los vehículos, mimados celosamente con
gran cariño y respeto por sus propietarios, nos sitúan ante impresionantes
modelos de firmas como Rolls-Royce, Fiat, Ford, Citroën, Packard, entre otros
automóviles cuya imagen marca y define una esencia importante de nuestro pasado
que recordamos, de forma anual, gracias al Rallye de Coches Antiguos del Valle
de La Orotava y la labor que, con gran esmero, efectúan los miembros del Club
de Amigos de los Coches Antiguos de Tenerife.
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