Esteban Domínguez
El tiempo para y en la memoria esta aquellas gentes que sin
pedir nada a cambio, han logrado un pueblo mejor más dinámico y no siempre
todos estamos a gusto.
Recuerdo entre otros
a don José Rodríguez Ramírez, a don Domingo Luis Estrada alcalde de la Unión de
Los dos Realejos, a Agustín Espinosa. A don Guillermo Camacho, a doña Manuela
Marrero, a doña Candelaria Estrada, a su hermana Doña Carmen, a Doña Amparo
Palmero, a doña Isabel Fuentes, a don Joaquín Estrada, al Doctor Don Antonio González
y González, a don Manuel Rodríguez Mesa y a tantos buenos realejeros, que
enumerarlos a todos es imposible.
De don José Rodríguez Ramírez como Director de EL DIA,
guardo grandes recuerdos sin duda alguna. También recuerdo a don José Hernández
Toste. A doña Ángeles Martin Fuentes y a sus hijos, entre ellos Ángel Delgado
Martín que lo fuera gobernador civil de la provincia, también recordar como no
podía ser de otra manara al recién fallecido Bernardo, cuya foto adjunto en
este comentario, y a tantos ilustres realejeros como lo fue don Elpidio
Hernández Toste, y a tantas personas que con distintos motivos ya no estén con
nosotros.
En las presentes fiestas, nos vienen a la mente muchas otras
distinguidas personas, que haría la lista muy grande.
De don José Rodríguez Ramírez, guardo gratos recuerdos, que
nunca podré olvidar, mucho hablamos en su despacho de los problemas de los tinerfeños y de los canarios en general.
Son recuerdos que se
quedan en la mente, como podía ser de otra manera, pero el tiempo a premia.
Y aunque no tenga
títulos académicos ni universitarios, sé muy bien donde tengo la mano derecha,
otros nos toman por “tontos” o sencillamente unos “magos” del norte. Todo eso
lo entiendo. Pero la isla no termina en la Cruz de Piedra. La isla si no me
falla la memoria, termina en Buenavista del norte, y, por lo tanto, aunque no
sepe escribir, que nadie se ofenda si tengo que añadir que notamos, la ausencia
de don José Rodríguez, que en ningún momento me cerró la puerta de EL DIA; al
contrario, me animaba y tuve la suerte de que en el primer libro que publiqué
“Apuntes realejeros” me realizó el prólogo, gesto que nunca olvidare.
También quiere recordar al “Conde de Bárbate”, quien también
realizó el prólogo del segundo libro, esto que le agradezco y que tanto sabía
de Viera y Clavijo y la Duquesa de Alba entra tantas otras personalidades.
En fin, son tiempos para recordar. Pata no olvidar a tantas
personas que, sin lucro de ninguna clase, han querido trabajar en silencio, por
este terruño canario.
Estero de quienes dirigen EL DIA en la actualidad, no piren
en la papelera, los artículos que este “analfabeto” les envía, y que mientras
no reciba una contra orden de la Dirección de EL DIA. Estaban Domínguez,
seguirá la misma línea marcada.
Comencé en el año 1972, y los seguiré enviando hasta, que
Doña Mercedes me diga por escrito o telefónicamente, que daño he causado este
“mago” del Norte al Periódico EL DIA.
Seguro estoy que, si estuviera su estimado padre, esto no lo
consentiría, y su hija muy bien lo sabe.
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