LOS REALEJOS ESTO NO TIENE REMEDIO

Esteban Domínguez

Aunque parezca mentira, los políticos actuales, no se merecen nuestra confianza, porque hasta el momento, no han demostrado todas las promesas que en su programa, nos han dicho.

Don Manuel Domínguez, al parecer, está olvidado de cuantas cosas, ha prometido.

Se ha olvidado de muchas cosas, y sus caprichos, no convencen ni a unos, ni a otros.

Le preocupan más, otros pueblos del norte, y se olvida constantemente de suyo.

Y nosotros, los ciudadanos nos preguntamos: Se ha olvidado nuestro alcalde, de lo que prometió, o fue todo una “falacia”.

Este municipio tiene entre otras cosas, muchas que realizar. Por ejemplo: ¿se ha preocupado por los que padecer hambre, por los que no tienen, trabajo o una vivienda digna, o un plato de lentejas?, creo que sí. El ejemplo lo vemos en la calle, en las puertas de las iglesias, allí acuden cada domingo, los “mendigos” en busca de una limosna.

¿Viene Vd. alguna vez a misa los domingos, o algunos de sus concejales?, pues si no lo ha hecho, le suplico que acuda a ellas. En la puerta como cada domingo, vemos a los que padecen hambre en busca de una limosna, y Vd. por lo visto, sin enterarse de la realidad.

¿Qué misión hacen los Servicios Sociales del Ayuntamiento? ¿Repartir pañales acaso?

Y si seguimos hablando Sr. Alcalde, existen muchos barrios abandonados,

Queremos parques, pero no para que los llenen de basura, queremos autoridades competentes, que les duelan los problemas de muchas familias necesitadas.

Déjese de “predicar, y de más trigo”. Porque de momento tengo que decirle una vez más, que en este municipio actúan cuando pasan las “desgracias” no antes, señor alcalde.

 Y para colmo, son los medios informativos los que acuden a Los Realejos cuando desgraciadamente, ocurre alguna desgracia, o bien somos agraciados por la lotería. Sita de banqueros, de emisoras de radio, de periodistas, de cadenas de televisión, etc.

También cuando celebramos las fiestas principales como son las del Tres de mayo, o El Carmen. Después paremos de contar, y por mucho que solicitemos los medios informativos, aquí nadie quiere venir.

 Posiblemente nos tengan como “tercer mundistas” o Los Realejos no está en el mapa.

En fin, no quiero cansarle, ni seguirlo “mareando”, y para dormir tranquilo utilicemos la acostumbrada medicación, pues al parecer el rum rum permanente, -y Vd. sabe muy bien lo que quiero decir, no tiene remedio, por mucho que se lo recuerde, una y otra vez.

 Lástima me da, que no tenga tiempo para leer nuestros mensajes.

Antes Vd. en la oposición, parecía que podía sembrar buen trigo, pero al paso de los años, nos estamos dando cuenta, que los políticos no están para defender a nuestros ciudadanos, sino posiblemente, para “llenar las alforjas” de la buena “leche que dan nuestras vacas”, dicho sea, con el mayor cariño y afecto.

Por último le aconsejo, que salga a la calle, que hable con las gentes, con las que le votaron en las urnas o no, y que no “esconda” bajo las alas el “pico”. Que sea Vd. como el Pelicán, que abre sus alas, para “arropar” a sus hijos. Esta será la mejor manera de gobernar.