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domingo, 1 de abril de 2018

¿QUIÉN FUE JESUCRISTO?


Evaristo Fuentes Melián

Al socaire de la reciente Semana Santa, hice una pequeña encuesta por wasap, sobre la existencia de Jesucristo y su identidad divina y/o humana. Hice las siguientes preguntas en un test  inspirado en un interesante programa de televisión.

Fueron cuatro las opiniones propuestas sobre quién es Jesucristo: 1) La guía de mi vida. 2) Gran profeta objeto de estudio, pero no aplicable al siglo XXI. 3) Es hijo de Dios y soy fiel en mi relación con Él. Y 4) Fue un hombre excepcional, sabio, pero no único (Sócrates lo fue también).

Además de que algunos encuestados no quieren mojarse, no saben/no contestan (aproximadamente un 50%), la diversidad de respuestas recibidas son de amplia gama, contemplan completo el abanico de las 4 preguntas del test. Mientras unos dicen sentirse identificados con Cristo/Dios, otros encuestados expresan, en su análisis somero, cosas muy interesantes agitadoras de conciencias.

Transcribo textualmente algunas parrafadas. He aquí las más extremistas: “Simplemente, más que probablemente, Cristo no existió, es una acumulación de leyendas y mitos”.  Y  otro se expresa así: “fueron muchos los mesías. La religión se usa para sumisos, qué más da quién fue Jesús”

Y por el otro extremo, hay un encuestado que no es católico practicante, pero que sin embargo responde rotundamente: “Cristo es la guía de mi vida”.  Otros se quedan en un término medio y responden con las números  2 y 4, Cristo fue un gran profeta y un hombre excepcional, pero nada de divinidad. Otros, en fin, contestan con cierta gracia, o mejor dicho, haciendo los graciosos. Por ejemplo: “A mí me basta con apuntarme de costalero”. Y este otro: “Me pillaste, ¡soy el diablo!”

Por último, un encuestado se complica y me complica la vida, se enrolla como una persiana saliendo por peteneras, mandándome un video y respondiéndome con otras preguntas: “Mira el video, donde se explica por qué triunfó el cristianismo”.

No somos nadie…y ¡que Dios nos coja confesados! Amén, así sea.

Espectador  

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