Javier Lima Estévez. Graduado en
Historia por la ULL
El 8 de enero de 1955, la vida de
Leoncio Rodríguez llegaba a su fin. Con su muerte nos dejaba una de las figuras
más importantes del periodismo canario, recogiendo a lo largo de multitud de
artículos los sucesos y la esencia de una época a la que podemos aproximarnos a
través de su testimonio.
Destacó su etapa como periodista en el
diario «El Progreso», formando parte de diversas redacciones periodísticas y
continuando su labor como fundador y director de «La Prensa», transformado
posteriormente en «El Día». Fue autor de diversos libros, siendo significativa
su obra Estampas tinerfeñas; en la que, a juicio de su prologista José Manuel
Guimerá, muestra un gran amor por su isla natal, reflejando ese sentimiento “en
el fervor con que la trata y en la bondad con que la sueña”. Asimismo, es
importante mencionar Los árboles históricos y tradicionales de Canarias. Al
respecto, la interesante edición del Catedrático y Profesor Emérito de Botánica
de la Universidad de La Laguna, Wolfredo Wildpret de la Torre, nos sitúa ante
una imagen de Leoncio Rodríguez interesado en la conservación y preservación
del medio, ofreciendo “un ejemplo claro de la preocupación que ilustres
patricios canarios en tiempos no tan lejanos clamaron para concienciar a los
canarios y en particular a sus autoridades con el fin de contribuir a la
protección de sus singulares recursos naturales”. Además, nuestro biografiado
sería autor de otras obras, resaltando en innumerables ocasiones el valor de
determinados elementos relacionados con la historia y el folklore canario;
siendo especialmente significativo su esfuerzo en la edición y publicación de
la «Biblioteca Canaria», recogiendo y agrupando textos antiguos y
contemporáneos sobre diversas temáticas, reeditándose en el año 2001 una
edición conmemorativa a cargo de diversos especialistas.
Multitud de artículos en la prensa de
la época recogieron el hondo pesar que en la sociedad canaria generó la pérdida
de Leoncio Rodríguez. Muestra de esa tristeza sería reflejada en un artículo
firmado por el poeta icodense Emeterio Gutiérrez Albelo (1905-1969), publicado
en el periódico «El Día» el 16 de enero de 1955, bajo el título “Adiós a don
Leoncio Rodríguez” y recopilado en la selección de artículos realizada para el
Portafolio de Tenerife. Emeterio Gutiérrez Albelo afirmaba que ante tal
situación tan solo encontraba palabras de gratitud al “hombre de la isla a
quien puso su pluma; siempre, al servicio de la misma, exaltando, loando, todos
sus valores –históricos, legendarios, geográficos, culturales…-“
Han pasado sesenta años de su pérdida.
La figura humana se difumina ya lejana en el tiempo, pero su huella intelectual
continúa muy presente entre nosotros a través de su importante legado
periodístico y literario. El Catedrático de Historia de América de la
Universidad de La Laguna, Manuel de Paz Sánchez, ha resaltado en los últimos
años diversos aspectos relacionados con Leoncio Rodríguez, utilizando su figura
para realizar una “relectura del tema del pleito intracanario” tal y como
muestra en Leoncio Rodríguez y Las Palmas de Gran Canaria. El legado regional
de un tinerfeño, publicado en ediciones Idea el año 2010.
En la actualidad, el nombre de Leoncio
Rodríguez se recuerda a través de un Premio de Periodismo concedido de forma
anual por el periódico «El Día», engrandeciendo la figura de un tinerfeño cuya
trayectoria finalizó sesenta años atrás.
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