GANA PABLO IGLESIAS, PIERDE EL PP

Lorenzo de Ara

Cabe la pregunta, ciertamente. ¿Ha conseguido el parvulario Pablo Iglesias podemizar la sociedad española? Y cabe perfectísimamente responder que sí. Es más, la respuesta no solo despeja dudas sobre la podemización del día a día de millones de españoles sin cultura democrática, creyentes fanatizados todos ellos de una democracia que regala derechos y más derechos pero cancela (palabra demodé) cualquier obligación, sacrificio, trabajo. Esta podemización llega inclusive a la derecha que gestiona pero que aborrece la ideología y la cultura política.  Hablamos, pues, de un éxito clamoroso de Pablo Iglesias y del horrendo 15-M.

Podemizar la sociedad comienza por parasitar la cabeza de la oposición. La cosa comienza por el líder de este PP con ganas de llegar a la Moncloa pero sin espermatozoides sanos para una penetración real y efectiva del óvulo democrático. Consigue el huésped ilegal hacer crecer en la cabeza del PP que la ideología no hace falta para ganarse el cariño y el respeto de los ciudadanos. Sólo gestión. Sólo economía. Con estas dos herramientas se da por ganada la Moncloa y la preñez de todas las urnas repartidas por España el próximo 28 de Mayo y en futuras elecciones generales. ¡Eso es podemizar al PP!

Sin cultura democrática, sin ideología de derecha, sin valores que enseñar a la sociedad, la política pasa a ser algo muy similar a lo impuesto por Putin en Rusia. Todo es iliberal, anómalo, deforme, bipolar, cortoplacista. Aunque el bipartidismo se haya ido a hacer puñetas, la gente percibe que el mal de siempre, resumido en la frase “todos son iguales”, se extiende por doquier y es consustancial al juego macabro de un sistema de partidos corruptos, clientelares y obscenamente vacíos de ideología.

Así el ciudadano se abraza a la creencia de que lo fácil es un derecho inquebrantable. Y lo fácil es expulsar de la realidad el sacrificio, la meritocracia, los madrugones, las obligaciones laborales, familiares, sociales, dándose por sentado que todo es gratis, que la izquierda es garantía de éxito sin dar palo al agua.

Cuando vivir bien deja de ser una aspiración, cuando tener de todo es una garantía primera, la basura que Pablo Iglesias desparramó el 15-M por España debe ser condecorada. El triunfo es absoluto.

Y cuando el PP asegura que aparcar el debate político es lo mejor para ese partido y para los intereses de España, entonces se entiende que el psoe venda como suyo el MidCat, del que aborrecía con palabras gruesas hace políticamente unos días. El gas para el psoe es basura ecológica. Perdón, lo era. Ahora es un remedio generoso, limpio y, por supuesto, made in Pedro Sánchez y la tal Teresa Ribera.

Todo es posible cuando la gran mentira del 15-M embota el sentido común y pone de rodillas al Partido Popular. Porque vivir de rodillas es vender a la sociedad que todo es gratis, que todo derecho cuesta nada, que el sacrificio es reaccionario y que aparcar la ideología es democrático.