Bienvenidos al Diario del Valle

SEARCH

sábado, 18 de junio de 2016

EL DOMINÓ, ALGO MAS QUE UN ENTRETENIMIENTO

Antonio-Pedro Tejera Reyes.
 ALGUNOS ANTECEDENTES“ Como una terapia de excelente valor, el juego del dominó se recomienda para agilizar y distraer la mente, evitando el estrés de la sobrecarga de preocupaciones y los excesos de trabajo, de la vida moderna”.
El tristemente fallecido Dr. Blas Limonggi, ha sido uno de los mejores jugadores de dominó que hemos conocido. Su trabajo habitual como médico ginecólogo, no tenía nada que ver con su especialización en este apasionante juego, el cual seguía diariamente en su propia casa mediante un ordenador que media aproximadamente más de un metro cuadrado, donde tenía incorporado un programa del referido juego, el cual tenía tres niveles de operación, a cuyo número uno y dos, ganaba él con cierta facilidad. El nivel tres, ya era otra cosa, pero también alguna vez terminaba él ganándole a la máquina.
Las veladas que pasamos durante varios años en el hotel de Centro Uslar, en Caracas, después de nuestras periódicas reuniones del Rotary Club de Montalbán, son unos de nuestros mejores recuerdos  en torno a este conocido juego, que el mismo Blas Limonggi, se encargaría de aclararnos se trata de algo más que un juego de entretenimiento, toda vez que forma parte de una terapia  muy necesaria para mantener las constantes vitales de nuestros cerebro en completa actividad, permitiendo al mismo agilizar sus reflejos relacionados con la reflexión, el razonamiento, y la inteligencia.

Partida de dominó, casero, un habitó frecuente en Venezuela.

Dentro de este significativo marco, aparecen las dotes humanas más clarividentes que conforman toda la dimensión de la creatividad, señalando de forma precisa la capacidad de los jugadores del dominó, diferenciando sus categorías dentro del espacio que las circunstancias ofrecen, con claras señales apreciativas sobre quienes practican este denominado juego ciencia.
 EL TIGRE DE CARAYACA
Curiosamente el Dr. Héctor Simoza Alarcón, era también médico, si bien traumatólogo, conocido en el círculo del dominó como “El Tigre de Carayaca”, fue el más famoso jugador de este juego en Venezuela, por sus grandes dotes como jugador y por ser el autor del libro “Ciencia y Arte  en el Dominó” auténtico “best seller”, en su segunda edición 23 años después de que en 1957 viese la luz, recoge en el prólogo la siguiente frase: “Sería bueno precisa aquí, que la técnica  aplicada al dominó que se juega en la actualidad, supera abiertamente a la técnica aplicada hasta los años 60”
Simoza Alarcón, considerado Gran Maestro del Dominó, matiza en la introducción de su libro, que este juego de salón denominado como de Deporte de Reyes, en la época en que fuese introducido en las Cortes Europeas, es un juego que tiene sus caracteres propios en el que intervienen una larga serie de caracteres del saber, como son la sicología, y el criterio deductivo, que junto a “la malicia” y el azar - cultivándoles convenientemente – permiten llegar a ser un magnifico jugador del mismo. “Es un juego mitad ciencia y mitad suerte, que en algunos momentos adquiere un profundo carácter matemático. Jugando bien al dominó es como se disfruta de un buen rato de placer. Aunque parezca paradójico, divierte más perder jugando bien, que ganar jugando mal.”
Son muchas las horas que pasamos con este atractivo juego, precisamente recomendado como una terapia necesaria para paliar una degeneración congénita producida por el exceso de un trabajo mental fuera de todo rigor, que podía llegar a tener graves consecuencias.

Tanto el Dr. Limonggi, como el famoso Héctor Simoza, tenían muy claro el valor de este juego recreativo como un complemento ideal para el buen funcionamiento de nuestra salud mental.
 JUGAR BIEN AL DOMINÓ
Copiamos algunas observaciones que se precisan en el libro referido, las cuales suscribimos íntegra-mente: “Desde hace muchos años, conozco a muchos jugadores aficionados que han llegado a viejos jugando exactamente igual. Es decir que han llegado al tope de sus conocimientos. Son jugadores rutinarios que, aunque pasen horas con el juego, no han llegado nunca a vivir la emoción de una buena jugada, y cuando la practican lo hacen por azar ignorando la repercusión y la magnitud que van a conseguir con la misma”
“Aquel que sabe menos que tu no puede enseñarnos nada… Cuando el contendor sea superior a ti, siempre te enseñara algo siempre que sepas razonar el porqué de sus jugadas, que muchas de las veces, ante su visión de cómo se desarrolla el juego, le hace predecir su pérdida, y juega para descartarse.” 
El dominó, considerado como el segundo juego ciencia, tiene la particularidad sobre el ajedrez de que el juego está tapado. Solo conoces tus siete fichas. Las otras son invisibles para el jugador, por eso la gestión deductiva es absolutamente necesaria, si bien está depende mucho de la calidad del compañero con quién compartas las partidas y la compenetración de ambos. Se dice generalmente que no existen buenos jugadores, sino buenas parejas. Nada más acertado.
Para jugar bien, es necesaria esa compenetración ideal para entenderse entre los dos compañeros. Existen reglas definidas que no siempre son aplicables a todas las partidas, ya que depende mucho de cómo van las partidas, y las necesidades de puntuar o de eliminar los tantos.
 EL DOMINÓ EN CANARIAS Y VENEZUELA
El dominó que se juega en Canarias, es mucho más preciso que el que se juega en Venezuela. Se juega sobre la base de conseguir cuarenta tantos, apuntando en cada mano las fichas de todos los contrincantes, ganadores y perdedores, un tanto por cada diez que se sumen en total. Esto hace que los mejo-res jugadores tengan cierta ventaja sobre los otros, ya que el azar está muy limitado.
En Venezuela la situación muy diferente. Se apuntan los tantos solos de los perdedores, y se suman por la unidad. Así el azar juega un importante papel, junto a la “malicia” que generalmente forma parte de las partidas amistosas.
La afición a este juego está muy extendida tanto en un lugar como en el otro, disputándose en Canarias en campeonato anual en el que intervienen un número considerable de equipos con doce jugadores cada uno, que abarcan la totalidad de la Isla de Tenerife, por poner un conocido ejemplo. Existen varias categorías, y los resultados y clasificaciones se publican semanalmente en determinados diarios de circulación regional.

Son frecuentes las reuniones para jugar dominó, en toda Venezuela. En la gráfica partida entre amigos, en la Quinta Islas Canarias, de la ciudad de Maturín.

En Venezuela está muy difundida también la afición a este atractivo juego. Como anécdota está el desafío que le propuso el ex presidente Jaime Lusinchi a Rafael Caldera, durante un debate para la presidente de la república.
Recientemente hemos visto difundida por la prensa mundial, la imagen del presidente de EE.UU. Barac Obama durante su pasada visita Cuba, jugando una partida de dominó. Hasta ahí llega la popularidad de este atractivo juego.


No hay comentarios:

Publicar un comentario